Desde hoy sancionarán las infracciones más peligrosas con multas de hasta 3.000 pesos. Hay operativos en distintas esquinas y en las avenidas Cantilo, Gral.Paz y Lugones
En la mañana de este lunes comenzó a funcionar el nuevo sistema de control de tránsito en la Ciudad de Buenos Aires.
El gobierno porteño incorporó dispositivos tecnológicos como radares y sistemas fotográficos, haciendo hincapié en sancionar las infracciones más peligrosas, como pasar semáforos en rojo o el exceso de velocidad.
Efectivos de la Policía Federal y personal de la Guardia Urbana y de la Dirección de Seguridad Vial fueron desplegados en distintas intersecciones de la ciudad para controlar a los automovilistas.
El subsecretario de Seguridad Urbana del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Manuel Izura, señaló que estos controles se enmarcan en el "Plan Estratégico de Seguridad Vial" a fin de sancionar "los excesos de velocidad, pasar en luz roja o estacionarse en la senda peatonal".
Se multará con 1.000 pesos a los automovilistas que superen la velocidad máxima y alcanzará los 3.000 pesos para los que violen un semáforo en rojo.
En declaraciones a radio América, Izura precisó que los operativos de seguridad vial "se realizarán en todas las intersecciones de ciudad" y habrá un control especial "en las avenidas Cantilo, General Paz y Lugones, donde muchos conductores superan la velocidad máxima".
"Vamos a profundizar los controles, ya que se incorporará "nueva tecnología para el control de las infracciones más graves", indicó el funcionario.
También se controlará "el uso del cinturón de seguridad y el no uso del celular" por parte de los conductores, ya que en los últimos tiempos la mayor parte de las multas fueron por faltas menores, tales como mal estacionamiento, añadió Izura.
El funcionario detalló que los nuevos elementos tecnológicos con que contarán los controladores son "radares para medir la velocidad" que son "máquinas de mano", que permiten "moverse de un lado a otro".
En las avenidas Figueroa Alcorta, Del Libertador, Juan Facundo Quiroja y la Costanera Rafael Obligado se puede conducir a 70 kilómetros; mientras que en la General Paz y Lugones la máxima es de 90. Según estadísticas policiales, en 2006 hubo en el distrito 12.995 accidentes, es decir 35,6 por día, y dejaron como saldo 14.530 heridos.