Los copos de nieve que sorprendieron hoy a los habitantes de la Capital Federal, el
conurbano bonaerense, Córdoba y el sur de Santa Fe representan no sólo la presencia de un fenómeno climatológico aislado, sino también una advertencia sobre los peligros que corre el planeta como consecuencia del calentamiento global.

Así lo confirmó en diálogo con la agencia Noticias Argentinas, el meteorólogo, Carlos Zotelo, y puntualizó que la nieve caída "es un fenómeno aislado, aunque no se puede afirmar ni descartar que se deba al cambio climático".

"Esto se debe a una sucesión de eventos extremos, como intensos fríos o períodos de calor, sequía o abundante lluvias en invierno, por ejemplo", explicó.

Además, expresó que la nevada de hoy se suma a las intensas nieblas que se registraron en la provincia de Buenos Aires semanas atrás y a la inusual caída de granizo que afectó a los porteños el año pasado: "Son muchos sucesos que estarían vinculados al
cambio climático".

De acuerdo con el meteorólogo, por estos días no se sabe con exactitud todas las conexiones establecidas entre las cadenas de sucesos y aseveró que "deberíamos estar en alerta", por los cambios de los últimos tiempos.

A modo de ejemplo, comentó que cada vez que aparece el "Efecto del Niño", haría prever que al año siguiente, en la zona del Río de la Plata, el invierno debería ser más cálido; no obstante, "eso no está ocurriendo pese a que en 2007 se registró esa corriente".

"No están establecidas todas las cadenas de eventos pero debemos estar abiertos a todas las posibilidades porque la atmósfera es algo que todavia no terminamos de entender del todo", dijo Zotelo, quien también es docente en la Universidad de
Buenos Aires.

En el mismo sentido se expresó el especialista en meteorología Federico Norte al afirmar que "la nieve sobre Buenos Aires no anula el fenómeno del calentamiento global. Simplemente denota el desequilibrio que se está produciendo".

En declaraciones radiales, sostuvo que "como consecuencia del cambio climático se dan fenómenos que no eran frecuentes en lugares insólitos. Pero esto no significa que estamos en la película 'El día después de Mañana'".

Además, aseguró que las "anomalías marcadas" son consecuencia "del desequilibrio que se produce en la atmósfera ante la modificación climática que se está viviendo".