Dijo que la plata que apareció en su despacho se la prestó su hermano. En la Rosada mucho no gustó y sugieren que se le buscan reemplazos. Danza de nombres
La polémica desatada por el hallazgo de 64 mil dólares en un armario del despacho de Felisa Miceli en el Palacio de Hacienda sigue generando fuertes repercusiones.
Una de ellas es la danza de nombres sobre posibles reemplazantes para suceder a la jefa de Hacienda. En principio, no se descarta que sea un integrante del propio gabinete de la cartera quien asuma el cargo.
En ese sentido, los funcionarios del actual Gobierno con mayor respaldo para el reemplazo serían los actuales secretarios de Industria, Miguel Peirano, de Hacienda, Carlos Mosse, y de Comercio Interior, Guillermo Moreno, según publica el matutino La Nación en su edición de hoy.
Este último volvió al ruedo con una fuerte presencia mediática tras las negociaciones de este viernes con representantes de colegios privados y de la empresa de servicios públicos Metrogas.
Pocas horas después de dar sus primeras declaraciones sobre el hecho en entrevistas con tres matutinos, la ministra fue entrevistada por diversas radios en las que deslizó que el escándalo por el dinero encontrado en su despacho "es una operación política de una magnitud extrema para perjudicarme".
De forma muy llamativa, expresó que "alguien quiere capitalizar" lo sucedido con el propósito de "quedarse con el Ministerio".
Atribuyendo intenciones políticas a la difusión de su desliz, apuntó que "las repercusiones se magnificaron, además en un momento donde estamos en campaña electoral".