Quieren expropiar el mural que Siqueiros realizó en el país
Un diputado del ARI presentó un proyecto de Ley para la expropiación de la obra que hoy se encuentra en un depósito al aire libre, con riesgo de destrucción total
25 de junio de 2007
El Diputado Nacional Fernando Sánchez (ARI), presentó un proyecto de ley de expropiación del mural “Ejercicio Plástico” que David Alfaro Siqueiros había realizado en 1933 en nuestro país y que hoy se encuentra en un depósito al aire libre con riesgo de destrucción total por la falta de protección.
La propuesta fue realizada en colaboración con la Diputada de la Ciudad Teresa de Anchorena (ARI), presidenta de la Comisión Especial de Patrimonio Arquitectónico de la Legislatura de la Ciudad, quien ha trabajado en los últimos años en pos de la recuperación de esta importante obra realizada por el destacado artista mexicano.
El mural, emplazado originalmente en el sótano abovedado de la quinta “Los Granados”, propiedad de Natalio Botana, se encuentra actualmente fraccionado y encerrado en cuatro contenedores a la intemperie en un predio perteneciente a la empresa “Grúas Don Bosco” (partido de La Matanza), por un conflicto judicial -aún sin resolución- entre quién sería el propietario de la obra y sus acreedores.
En el año 1991, el mural había sido retirado del sitio en el que se encontraba emplazado mediante un complejo trabajo de ingeniería estructural, a los fines de su eventual exposición. No obstante, la obra -declarada bien de interés histórico artístico nacional por el Poder Ejecutivo mediante decreto 1045/2003-, pese a todas las gestiones a los efectos de su traslado, restauración y resguardo, se encuentra desde hace casi 16 años en pésimas condiciones de preservación frente a marañas burocráticas y trámites judiciales.
“De no producirse con rapidez la detención de los procesos de deterioro mediante un cambio sustancial en la forma de proteger las piezas que se encuentran dentro de los contenedores, la obra puede terminar siendo totalmente irrecuperable”, es la conclusión a la que habían arribado un grupo de expertos que inspeccionó la obra en 2003 por orden del juzgado a cargo de la quiebra de la empresa propietaria y a pedido de Teresa de Anchorena cuando se desempeñaba como Directora de Cooperación Internacional de la Secretaria de Cultura de la Nación.
La expropiación del mural, que propone el proyecto presentado por el Diputado Sánchez (ARI), supone cumplir con los tratados internacionales de preservación de obras de arte, a la vez que el resguardo de una pieza que es considerada por México como “Monumento Artístico de la Nación” y que ha motivado sucesivos reclamos diplomáticos por la desidia y el desprecio con el que ha sido tratada.
La conservación del mural en manos del Estado Argentino permitirá al Estado, por otra parte, disponer en forma definitiva de esta obra para su traslado, restauración y exhibición en un lugar adecuado, y significará la posibilidad de conservar una obra cumbre del muralismo latinoamericano para que pueda ser apreciada por toda la población.