Al menos nueve personas arrojaron entre siete y ocho bombas contra el frente del edificio, ubicado sobre calle Piedras. Los investigadores analizan una huella en una de las botellas
Un grupo de al menos nueve personas atacó con bombas molotov el acceso principal del edificio del Grupo Clarín, sobre calle Piedras al 1700, en el barrio porteño de Barracas. El ataque mereció una rápida condena de la dirigencia política y el resto de los medios de comunicación, y la promesa del gobierno de identificar a los responsables.
El presidente Alberto Fernández repudió el ataque y advirtió que "la violencia siempre altera la convivencia democrática".
En tanto, el ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, exigió identificar en forma rápida a los responsables. "Repudio el ataque al Grupo @clarincom en la sede de la calle Piedras, con bombas molotov, producido el lunes por la noche, donde al menos nueve personas encapuchadas arrojaron explosivos a las oficinas.
Confío en que se identifiquen a los autores y se los sancione", sostuvo.
La secuencia quedó filmada y la investigación ya está en manos del Juzgado Federal N° 9, a cargo del juez Luis Rodríguez, quien caratuló la causa como "intimidación pública".
El equipo de seguridad de la empresa hizo un reporte del hecho, en el que detalla que a las 23:05 de este lunes se observó a un grupo de 9 personas encapuchadas llegar caminando por la calle Piedras y detenerse frente al edificio de AGEA, ubicado sobre esa calle al 1743.
Un video registrado por una cámara de seguridad permite ver claramente que el grupo baja a la calle y algunos de sus integrantes comienza a encender botellas con combustible y una mecha de tela. En ese preciso momento pasan dos colectivos, uno es un interno de la Línea 39.
Los atacantes esperan unos segundos y comienzan con la agresión. La primera bomba no llega a explotar. La segunda da en unos de los árboles y genera las primeras llamas. Así, en secuencia, encienden y arrojan entre 7 y 8 bombas. Los artefactos impactaron sobre la vereda y en la puerta del hall de ingreso al edificio de Clarín, provocando un principio de incendio.
El video muestra con claridad toda la secuencia. Los atacantes, tras arrojar las bombas, vuelven por Piedras hacia calle Ituzaingó y finalmente escapan por calle Perú. No hubo heridos, tampoco daños materiales, aunque las manchas del combustible utilizado y los rastros del fuego quedaron registrados en el frente del edificio. A las 23:15 llegó al lugar una dotación de bomberos, que no llegó a intervenir, ya que los focos de incendio se extinguieron por si solos.
Minutos más tarde se presentaron agentes de la comisaria 4D y a cargo de operativo estuvo el oficial Alexis Gómez, quien junto a Bomberos dispuso delimitar la zona y resguardar el área para diversas pericias.
A requerimiento del juzgado de turno interviniente, se entregaron los registros fílmicos, en los cuales se observaron a los involucrados en el hecho. Según pudo saber Clarín de fuentes judiciales, los investigadores detectaron una huella en una de las botellas que no alcanzó a explotar. La misma está siendo analizada por el área específica de la Policía Federal Argentina (PFA).
Por otro lado, al analizar las primeras imágenes señalaron que las mismas "son muy oscuras", por ese motivo darán intervención a la Unidad Antiterrorismo y solicitarán al gobierno de la Ciudad las cámaras ubicadas en la zona "para analizar hacia adelante y hacia atrás los movimientos para dar con los atacante", explicaron fuentes del caso.
En un comunicado, el Grupo Clarín detalló que "en la noche de ayer (lunes) un grupo de personas atacó la sede del diario y del Grupo Clarín en la calle Piedras 1743 de la ciudad de Buenos Aires (...). Lamentamos y condenamos este grave hecho que a primera vista aparece como una expresión violenta de intolerancia contra un medio de comunicación. Y esperamos su urgente esclarecimiento y sanción".
Repudio de entidades periodísticasLa Asociación de Entidades Periodísticas Argentina (ADEPA), el Foro de Periodistas Argentinos (FOPEA), la Fundación Libertad de Expresión + Democracia (LED) y el Sindicato de Prensa de Buenos Aires (SIPREBA) condenaron "enérgicamente" y exigieron el "rápido esclarecimiento" del ataque incendiario contra la sede de Clarín.
"Adepa condena enérgicamente el hecho, que es una expresión violenta de intolerancia contra un grupo de medios de comunicación y configura un grave ataque a la libertad de expresión, y exige el rápido esclarecimiento y la sanción a sus responsables", planteó la entidad representativa de los medios, en un comunicado.
También FOPEA, la entidad que nuclea a más de 600 periodistas, repudió "enérgicamente el violento ataque contra un edificio del Grupo Clarín en la Capital Federal, y reclama a la Justicia Federal que investigue este nuevo acto de intolerancia e intimidación contra el trabajo de la prensa".
"FOPEA advierte sobre la gravedad de los hechos ocurridos, que se suman al ataque que en marzo de este año sufrió la redacción del diario Río Negro, y exige a la Justicia una profunda investigación y condena de los responsables del flagrante atentado a la libertad de prensa", sostuvo la entidad que representa a los periodistas.
Por su parte, la Comisión Gremial Interna de los trabajadores de Clarín dijo que "junto al SIPREBA, repudiamos el ataque al edificio de Clarín, nuestro lugar de trabajo, en el que hay compañeras y compañeros durante las 24hs. Exigimos urgente esclarecimiento de los hechos y condiciones seguras para ejercer nuestras tareas sin riesgos y con libertad".
"Es el segundo atentado a medios en un año. En marzo al Diario Río Negro, anoche a Clarín", sostuvo Silvana Giudici, presidenta de la Fundación LED y directora por la oposición del Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM). Y agregó: "Se espera repudio del gobierno nacional en defensa de la libertad de prensa, investigación y sanción de los responsables. Permitir que la violencia escale viene siendo consecuencia de su inacción".
"Situaciones como la que nos ocupa constituyen una grave limitación al ejercicio de la libertad de expresión y de prensa y el derecho al acceso a la información por parte de los ciudadanos, consagrados en nuestra Constitución Nacional y en los Tratados Internacionales que la integran, y son incompatibles con el desarrollo de una sociedad democrática.", aseguró en un comunicado la Fundación LED.