La Pulga fue sustituido por Icardi a la mitad del encuentro ante Lille. Sus gestos y rendimiento inquietaron. Se vienen las Eliminatorias con Brasil
Lionel Messi encendió la alarma en Francia: en el entretiempo del partido entre París Saint Germain y Lille por la Fecha 12 de la Ligue 1, fue reemplazado por Mauro Icardi después de tener una discreta primera mitad en la que mostró algunas señales de malestar en su isquiotibial izquierdo.
Su semblante generó preocupación en el elenco parisino y también en el cuerpo técnico de la selección argentina, pensando en la doble jornada de Eliminatorias Sudamericanas que se llevarán a cabo en noviembre.
En la misma sintonía que su equipo,
Leo no tuvo su mejor versión contra el vigente campeón de la liga francesa en
Parque de los Príncipes. Pese a jugar con gran parte de sus figuras, los parisinos fueron dominados en gran parte del juego y de hecho se fueron al vestuario 1-0 en desventaja después de los primeros 45 minutos.
El canadiense Jonathan David anotó para la visita pasada la media hora de juego. Al rosarino se lo vio errático, incómodo e impreciso. Fuera de su tónica habitual.
Justo antes de la apertura del tanteador, Messi contó con una buena ocasión para inflar la red rival con una sesión por alto de Ángel Di María, pero no empalmó bien la pelota y la tiró desviada.
Antes de su salida, ejecutó un tiro libre al borde del área que se fue varios metros por encima del travesaño. Una actuación, como mínimo, fuera de lo normal.
Y más si se tiene en cuenta que no se había entrenado el día anterior a esta cita por una molestia muscular, según confirmó su entrenador.
La presencia del capitán del seleccionado argentino había sido una incógnita hasta minutos antes del comienzo del encuentro. La duda había quedado instalada el jueves, luego de que se perdiera el último entrenamiento previo a este duelo.
Sin embargo, Mauricio Pochettino no solo apostó por incluirlo en la lista de convocados, sino también en el ataque del equipo junto a Di María y Neymar.
rob