El Gobierno porteño busca recuperar parte del tiempo de educación perdido por la pandemia.

El objetivo es que, de manera progresiva, se recupere la presencialidad completa en las escuelas de la Ciudad.

Por eso, las burbujas pasarán a ser los cursos completos y ya no estarán divididos como hasta ahora. La Ciudad habilitó hace dos semanas la presencialidad en la secundaria, que pasó un par de meses con un sistema de bimodalidad. Se hizo, según se explicó, para aprovechar que en las dos semanas previas a las vacaciones de invierno suelen recuperar contenidos aquellos que tienen notas bajas.

Como hizo el año pasado con el “plan gradual” para sumar actividades tras el cierre total de la cuarentena dura de los primeros meses de la pandemia, ahora Horacio Rodríguez Larreta busca tomar la iniciativa con las clases, al mismo tiempo que la campaña electoral de cara a las elecciones legislativas da sus primeros pasos.

A diferencia de lo que ocurre hasta ahora, que los cursos están divididos en dos burbujas reducidas que incluso en algunas instituciones no comparten el horario, desde agosto se avanzará para que la burbuja sea cada curso y que las clases presenciales sean lo más parecido posible a lo que eran “antes de la pandemia”. Según le indicaron fuentes del gobierno porteño a Clarín, el plan incluye a los niveles inicial y primario, que son los que más presencialidad recuperaron, y también al secundario, terciario y universitario. En estos dos últimos casos, se mantienen en la virtualidad completa.

El anuncio formal lo realizará el jefe de Gobierno porteño a las 13.30 en el Polo Educativo de Mataderos, donde estará acompañado por el jefe de Gabinete, Felipe Miguel; los ministros de Educación, Soledad Acuña y de Salud, Fernán Quirós, y el subsecretario de Relaciones Internacionales e Institucionales, Francisco Resnicoff.