Desde Merlo, adonde llegó para presentar el programa “Paradas Seguras” dirigido a los usuarios de colectivos, el presidente Alberto Fernández recordó al exministro de Transporte Mario Meoni, que falleció el viernes en un accidente de tránsito, y dijo que su muerte deja una enseñanza para valorar la vida.

Relacionándola con las pérdidas de la pandemia, instó a la oposición a dejar de lado los matices y a trabajar por una salida unificada.

“Para sobrellevar mejor ese tiempo difícil, olvidémonos de las diferencias”, pidió el primer mandatario, quien dijo que este no es un problema que se resuelve “haciendo política” y agregó: “Ninguna coyuntura política nos autoriza a dejar de valorar la vida”.

El Presidente dijo que “se puede ser la causa de muerte de otros” y que “se puede ir a buscar la propia muerte”. Por ello, sostuvo: “No nos podemos dar el lujo de decirle a un argentino ‘no te di atención porque no hay camas’, ni de exigirle más al sistema de salud”.

Ante la presión de la administración bonaerense para establecer un confinamiento estricto, Fernández no adelantó las medidas que tomará luego del 30 de abril -cuando vence el decreto vigente- para contener la segunda ola de coronavirus.

“Pienso que en estos tiempos duros, irreversibles y complejos, en momentos difíciles como hoy, donde la explosión de casos hace que las camas se saturen y que de repente los hospitales privados de la Ciudad le tengan que pedir al [Hospital] Muñiz que le habilite camas, después de haber mandado pacientes al Gran Buenos Aires para ser atendidos... En ese contexto me pregunto si no debemos reflexionar un segundo cuánto vale la vida, un segundo”, reflexionó el mandatario, que aún espera la definición de la Corte Suprema de Justicia en cuanto al conflicto con la gestión de Horacio Rodríguez Larreta sobre la presencialidad en las aulas.

rob