El fiscal dio por probada la intervención del marido de María Marta García Belsunce en el crimen. Aseguró que el viudo y otras dos personas participaron del asesinato
En el primer paso del tramo final del juicio por el crimen de María Marta García Belsunce, el fiscal Diego Molina Pico dio por probada la "intervención" del viudo de la víctima, Carlos Carrascosa y de otras dos personas en el asesinato de la mujer.
"No caben dudas de que han quedado demostrado los extremos que la fiscalia sugiere, después de haber escuchado los testimonios y analizado las pruebas que se presentaron en este juicio", comenzó el fiscal en los tribunales de San Isidro.
Ante la atenta mirada del acusado, continuó: "Todos sabemos que Carrascosa intervino con la participación de dos personas más en el asesinato de su cónyuge".
Se refirió a las "maniobras tendientes a eludir la Justicia para lograr impunidad" y enumeró: "Se modificaron la escena y los actores del crimen, se alteraron los horarios, se trató de impedir el ingreso de una ambulancia y se nego expresamente la entrada de un patrullero".
No se detuvo allí y añadió: "Se acondicionó el cuerpo, se ocultaron heridas con un pegamento mencionado aquí como La gotita, se deshicieron de un proyectil, ocultaron el arma, se intentó transferir la culpabilidad a terceros ajenos y se inventaron versiones sobre el accidente domiciliario".
En este punto comenzó, a espaldas de Molina Pico, la reproducción, a través de un proyector, de una presentación llamada “Versión y realidad de los hechos”.
En el esquema presentado por el fiscal, concentrado en dejar las contradicciones de los acusados en evidencia, aparecen de un lado los dichos de Carrascosa y del otro las suposiciones del fiscal.
Con tono calmo, caminando por la sala, y usando las manos para acentuar sus dichos relató con extremo detalle los hechos de la tarde 27 de octubre de 2002.
En varios momentos usó un puntero láser para marcar los hechos más relevantes de su presentación. Luego fijó su atención, y el puntero, sobre el mapa del country Carmel. Allí comenzó a explicar los movimientos de los protagonistas del caso durante aquella tarde y a contrastarlos con los dichos de Carrascosa en sus declaraciones ante el tribunal.
De acuerdo a lo previsto, el fiscal pedira prisión perpetua para Carrascosa y que se investigue como posibles coautores al matrimonio Guillermo Bártoli e Irene Hurtig.
Es probable que acuse al viudo por homicidio agravado por el vínculo, que prevé prisión perpetua, y en forma subsidiaria por el encubrimiento, que tiene una pena de hasta seis años, tal como lo hizo cuando pidió la elevación a juicio del expediente.