La actriz, que se autonominó el jueves pasado, fue la más votada por el público para abandonar la casa a 15 días de haber ingresado. Fue una noche emotiva
Por Roberto BlancoPor escaso margen, solo cuatro puntos de porcentaje de diferencia con Jorge "Roña" Castro, Melina Pitra hizo un paso fugaz, sin pena ni gloria, en Gran Hermano
Famosos y debió abandonar la casa al ser la más votada por el público, en una elección que también la tuvo como protagonista a Mariana Otero.
Melina se fue feliz luego de autonominarse el jueves pasado y sostener que "extrañaba mucho" a sus afectos, en una participación de apenas dos semanas en
el juego tras haber ingresado hace dos lunes atrás junto a Robertino Tarantini en reemplazo de Pachu Peña.
De esta manera, Melina se convirtió en la cuarta expulsada de la casa, luego de Amalia Granata, Dolores Moreno y Nino Dolce, en un juego que también ya tuvo
la salida de Pachu -por renuncia propia- y de Luis Vadalá, quien el viernes fue sacado de urgencia del juego tras sentir fuertes dolores en el pecho.
El ex de Moria Casán estuvo presente en el estudio de GH y luego de charlar con el animador Jorge Rial, ingresó a la casa, a través de la pantalla de plasma, para charlar por unos minutos con sus ex compañeros, que estaban preocupados por su salud.
"Los extraño mucho", dijo Luis muy emocionado mientras reiteró que, a pesar de algunos momentos malos, se lleva "un gran recuerdo" de la casa y sus integrantes.
"Perdónenme, soy un hombre de 52 años y a veces no podía estar al ritmo de sus juegos. De todas formas me divertí y la pasé muy bien. Jueguen, peleen menos y
diviértanse", sostuvo Vadalá que no paraba de llorar y hacer emocionar a los integrantes de la casa.
En ese marco, tal como lo había comentado antes en la charla intima con Rial, Vadalá dijo que si existía "una mínima posibilidad" de poder volver a entrar, lo haría "sin dudar", aunque adelantó que "comenzaría a jugar y a divertirme más".
En un momento del juego, el reglamento del programa establece que uno de los ex integrantes -expulsados de la casa- puede volver a ingresar al juego por voto de los que están aún participando.
Vadalá dedicó saludos especiales al "Roña" a quien considera su amigo, mientras el boxeador se comprometió públicamente a intentar sacar adelante "el sueño" que llevó a el ex de Moria a participar en le Gran Hermano Famosos.
Previamente, Luis tuvo duras reflexiones ante Rial, reconoció que el choque con Dolce lo dejo muy mal y que en otras circunstancias lo habría "cagado a golpes", al tiempo que recordó el duro momento que vivió cuando terminó su relación de nueve años con la vedette: "Tuve que salir a buscar trabajo y nadie me dio una mano", se quejó.
"No se si fui el marido, el amante, la pareja o la compañía de esa famosa, solo sé que después de la ruptura, del día a la noche fui un cero a la izquierda para muchos", reflexionó con crudeza.
La gala del lunes dejó algunos momentos interesantes, fundamentalmente los relacionados al ingreso de Diego a la casa y cierta animosidad que recibió de algunos integrantes, entre ellos Mariana y "Roña" Castro y Carlos Nahir.
Sin embargo, la experiencia del ex integratante de GH 2007, fue la pieza clave para comenzar a demostrar que sabe de este juego y comenzó con su estrategia de
seducción de uno a uno, en un trabajo de hormiga que lo puede llevar muy lejos.
La primera elegida fue Lissa, la ex Bandana ya cayó rendida a sus pies, no solo porque Diego confesó que en la cárcel la música de la banda que integró la
chica fue una "gran compañía", sino porque el ex tumbero desplegó sus dotes de seductor y tiene a la cantantes rendida a sus pies.
Para competir con la noche "azulgrana" que propuso Marcelo Tinelli para festejar el campeonato de San Lorenzo, GH, muy flexible a los ritmos del rating, permitió que los integrantes de la casa vieran en directo el domingo el partido entre San Lorenzo y Arsenal.
El festejo fue para los dos hinchas del "cuervo" dentro de la casa, Fernanda O'Neill -muy tranquila ella- y de Hernán Caire, quien vivió el partido en forma intensa. Al final, abrazado a su bandera cuerva, el animador salió al patio a llorar en soledad la emoción del nuevo título del club de sus amores.
Finalmente, cuando ya tenía decidio irse, "Roña" Castro cambió de opinión, primero por lo sucedido a Vadalá, luego por su pelea personal con Robertino Tarantini quien lo votó en la gala de nominación, luego por el ingreso de Diego que de apoco le fue
desagradando y finalmente por el pedido de su esposa, Belén, quien lo alentó a seguir hasta el final.
"Me cagó, me bajó la cortina, no le puedo decir que no", dijo Locomotora a GH luego de recibir el pedio de su esposa.