La serie de televisión "Batman", una de las tiras más emblemáticas dentro del universo del personaje creado por Bob Kane para DC Comics, cumple este martes 55 años.

Debutó en la pantalla chica el 12 de enero de 1966 y desde ese momento se transformó en pionera en su tiempo y emocionó a chicos y grandes de diferentes generaciones.

Fue emitida por la cadena de televisión estadounidense ABC hasta 1968. En total, sus 3 temporadas, están compuestas por 120 episodios.

El programa, que en la Argentina primero descubrimos a fines de los sesenta en blanco y negro y ya en los ochenta revaloramos en color, nació cuando el productor televisivo William Dozier, compró unos comic en un aeropuerto antes de un viaje de negocios a Nueva York.

En ese lapso se divirtió leyendo las revistas y ahí nació la idea, que sería un gran éxito.Él mismo se encargaría de producir una serie de televisión donde se narrasen la doble vida y las aventuras del millonario Bruno Díaz, y esa, fue la verdadera génesis de Batman.

Dozier tenía claro que la única forma de ser fiel a lo que había en los comics que leyó era no tomárselo en serio, recrea el mundo oscuro del personaje con una mirada más brillante, con humor y mucho sentido pop.

La serie resultó un éxito desde su estreno, en enero de 1966, montado en su mítica sintonía, sus planos enormemente coloridos, la aparición en pantalla de onomatopeyas cada vez que había peleas, sus frases ingeniosas, su cuidado vestuario y geniales guiones presididos por el humor, la sátira y los dobles significados.

La elección de los actores fue también una decisión clave con un Batman, supuestamente más musculoso, con Adam West para ese papel y un joven de 19 años, que se identificara con los más jóvenes, en Burt Ward, para Robin.




A eso se sumó grandes actores para los personajes de los grandes villanos como César Romero y su inolvidable Guasón, con la particularidad de no querer sacarse su mítico bigote y que los maquilladores de la serie pudieron disimular.

También el ya experimentado actor Burgess Meredith para increíble Pingüino, años antes de convertirse en el entrenador de Rocky, en las primeras tres películas de la saga.

A ellos se sumaron Vicent Prince, Joan Collins, y la primera Gatubela, Julie Newman que dejó una huella difícil de igualar.

Además, estaban los cameos en los que los personajes asomaban por la ventana mientras Batman y Robin trepaban por la fachada se convirtieron en una seña de identidad.

Los actores protagonistas (West y Ward) construyeron una gran amistad que se extendió hasta la muerte del actor que hizo de Batman, y ya retirado del mundo de la actuación, el intérprete de Robin, dedicado a la venta de automóviles, siempre reconoció la gran ayuda que recibió en su carrera por parte del galán que se calzó el traje del hombre murciélago.

Ward reconoció que esos años de fama por la serie fueron “salvajes y llenos de excesos y mujeres”, en una demostración de la locura que se generó alrededor del programa.




En este punto, la serie tuvo, en los aún sesenta cargados de moralidad en la televisión de EE.UU., una clara persecución contra el actor que hacía del joven maravilla, al censurar su vestuario porque “le marcaba mucho su masculinidad”.

Los vestuaristas de la serie le colocaban bajo el traje de Robin, doble ropa interior un sujetador de pene y hasta un ajustatestículos.

Sin embargo, la Liga Católica de ese país seguía atacando la serie por el problema que tenía entre las piernas el joven actor, por lo cual los productores, ya sin alternativas, le dieron unas pastillas para “reducir su pene”.

“Las tomé durante tres días y luego decidí que probablemente podrían impedirme poder tener hijos . Dejé de hacer eso y tan solo usé mi capa para cubrirlo”, confesaría años más tarde el propio Ward.

La serie duró solo tres años, el último con menos rating y el ingreso del personaje de “Batichica” no ayudó mucho a una producción que ya no tenía el éxito de las dos primeras temporadas.

Sin embargo, el programa no dejó nunca de verse en todo el mundo por más de 30 años en eternas y esperadas repeticiones y sus protagonista convertidos en ídolos para siempre.

rob