En el país la firma tiene fuerte presencia en el consumo masivo, con marcas como La Serenísima, Villavicencio, Villa del Sur y Nutrilón, entre otras
Con unos 5.000 empleados en la Argentina, la multinacional francesa Danone puso en marcha un plan de alto alcance de retiros voluntarios en su principal división, la de lácteos, para adecuar sus estructuras al "nuevo escenario de negocios". En el país la firma pisa fuerte en el consumo masivo, con marcas como La Serenísima, Villavicencio, Villa del Sur y Nutrilón, entre otras.
El gigante de la alimentación tiene esos empleados en los sectores de lácteos, aguas y nutrición, y dice haber acumulado cuatro años de pérdidas.
La multinacional puso en marcha su proceso de revisión de inversiones en la Argentina y otros lugares del mundo, que ya había anticipado en octubre del 2020.
Ya comunicó a sus empleados que ofrecerá a los trabajadores del sector lácteo un plan de retiros voluntarios para reducir personal y achicar estructuras.
La oferta de retiros voluntarios incluye inicialmente el pago del 170% de la indemnización por despido, y 15 cuotas mensuales de $100.000, y estaría vigente hasta el 23 de enero.
Una segunda etapa propone una indemnización del 150% y diez cuotas mensuales de $100.000, y regiría hasta mediados de febrero.
Uno de los principales problemas que afronta la división lácteos es que de una proyección de procesamiento superior a 1,2 millones de toneladas de leche anuales, cayó a apenas 350.000, ya que el consumo se derrumbó en los últimos años.
Danone informó que su facturación descendió 9,3% en el tercer trimestre de 2020 a nivel global, y ya había anticipado en octubre una revisión de su estrategia de negocios en la Argentina.
Desde la empresa admiten que siguen funcionando gracias a los fondos que están recibiendo desde la casa matriz en París.
El ajuste se impulsa dentro de un plan de reorganización y reestructuración de sus marcas en distintas partes del mundo.
Las dos divisiones principales de la actividad de Danone presentaron pérdidas en los últimos cuatro años.
En 2019, tuvo un rojo de 100 millones de euros a nivel global.
El gigante francés había anunciado el año pasado una revisión estratégica completa, comenzando por Argentina y la marca Vega (Estados Unidos), cuyas ventas combinadas representaban alrededor de u$s 585 millones anuales, aunque tras la pandemia y la devaluación en Argentina esos números habrían caído fuerte, estiman en el mercado.