La heredera del emporio hotelero que lleva su apellido debió finalmente presentarse en la cárcel del condado de Los Angeles para cumplir su sentencia.

Paris Hilton, de 26 años, cambió sus Guccis y ropas de diseñadores famosos por un atuendo carcelario el domingo por la noche al comenzar a cumplir su condena de 23 días en prisión por violar una pena anterior por conducir ebria.

"Paris Hilton se ha presentado para comenzar a cumplir su sentencia por violar su probation en la cárcel del condado de Los Angeles, localizada en Lynwood, California", dijo en un comunicado su abogado, Richard Hutton.

El comunicado también citó a Hilton diciendo: "Este es un momento importante en mi vida y necesito responsabilizarme de mis acciones. En el futuro, tengo previsto asumir un papel más activo en las decisiones que tome (...) Aunque estoy asustada, estoy lista para empezar mi sentencia".

De acuerdo al departamento del sheriff del condado de Los Angeles, Hilton fue admitida a las 23.38 hora local.

Hutton dijo en el comunicado que la rica heredera se presentó por sí misma en la cárcel del condado de Los Angeles, luego de que él la pasara a buscar por la casa de sus padres y la llevara hasta la oficina del sheriff.

Hilton debía presentarse el martes para comenzar su sentencia, que ya ha sido recortada de 45 a 23 días.

A primera hora de la tarde, la famosa heredera asistió a la ceremonia de los MTV Movie Awards, cerca de Hollywood, donde fue objeto de las bromas los presentadores del premio.

Hilton fue arrestada en septiembre por conducir ebria, y en enero, tras un proceso judicial, fue sentenciada a tres años de probatio y se le suspendió la licencia de manejo.

Pero en febrero fue detenida nuevamente manejando con una licencia sospechosa, cuando la policía la interceptó por conducir por encima de la velocidad permitida. Un tribunal falló el 4 de mayo que eso constituía una violación a la probation y la sentenció a 45 días en cárcel.

Hilton permanecerá en una unidad para celebridades y prisioneras de alto perfil, separada de la población carcelaria común, según dijeron las autoridades.