Los médicos intensivistas desde marzo no tienen descanso. Pidieron que la gente se cuide del Covid porque las terapias están al borde del colapso
Los contagios de coronavirus están poniendo a la Argentina al borde del colapso sanitario. La Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI) advirtió que "los recursos para salvar a pacientes de coronavirus se están agotando" y convocó a la sociedad a que "reflexione" porque "el virus nos está ganando".
Mediante un comunicado firmado por la presidenta y el vicepresidente de la entidad, doctores Rosa Reina y Guillermo Chiappero, la SATI expresa que "los médicos, enfermeros, kinesiólogos y otros miembros de la comunidad de la terapia intensiva sentimos que estamos perdiendo la batalla. Sentimos que los recursos para salvar a los pacientes con coronavirus se están agotando".
"La mayoría de las Unidades de Terapia Intensiva del país se encuentran con un altísimo nivel de ocupación. Los recursos físicos y tecnológicos como las camas con respiradores y monitores son cada vez más escasos. La cuestión principal, sin embargo, es la escasez de los trabajadores de la terapia intensiva, que a diferencia de las camas y los respiradores, no pueden multiplicarse", afirma.
Con un posteo a través de la cuenta de SATI en la red social Twitter, titulado "Solicitada. Los Profesionales de las Terapias Intensivas de Argentina sentimos que estamos perdiendo la batalla y ya estamos agotados y no tenemos reemplazos!" la entidad destaca: "los intensivistas, que ya éramos pocos antes de la pandemia, hoy nosencontramos al límite de nuestras fuerzas, raleados por la enfermedad, exhaustos por el trabajo continuo e intenso, atendiendo cada vez más pacientes".
"También tenemos que lamentar bajas, personal infectado y lamentablemente, fallecidos, colegas y amigos caídos que nos duelen, que nos desgarran tan profundamente", precisa.
"Terminamos una guardia en una Unidad de Terapia Intensiva y salimos apresuradamente para otro trabajo. Necesitamos trabajar en más de un lugar para llegar a fin de mes (...) ganamos sueldos increíblemente bajos, que dejan estupefactos a quienes escuchan cuál es nuestro salario".