La producción de bienes y servicios se derrumbó 11,5% en marzo último en forma interanual, y sufrió la peor caída desde mayo del 2009, informó hoy el INDEC. La baja habría sido de niveles catastróficos en abril, cuando rigió a plenos el aislamiento social.

Sólo se salvó el rubro "agua, gas y electricidad", que creció 6,7%, en parte por el impacto del coronavirus, que obligó a aumentar la demandar de insumos clave para atender la emergencia sanitaria, como la higiene.

A la baja que ya venía mostrando la actividad en los últimos dos años, se sumó el durísimo impacto de la cuarentena aplicada a partir del 20 de marzo último, ante la pandemia de coronavirus.

El Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE) mostró además una fuerte caída del 9,8% respecto de febrero.

Como consecuencia de la contracción registrada en marzo, la economía cayó en el primer trimestre del año un 5,4%, comparada con igual período del año anterior.

Hasta ahora la mayor caída se había registrado en mayo del 2009, cuando el indicador del EMAE registró una contracción del 13,7%, según la base de datos actualizada del INDEC.

El INDEC aclaró que debido a los inconvenientes causados por el aislamiento social, el registro de marzo del EMAE se elaboró de acuerdo a "a las recomendaciones internacionales, se buscó evitar afectar significativamente la tendencia de los meses previos.

"Hay que destacar que aún se desconoce el efecto final que tendrá la Covid-19 sobre la actividad", señaló en el informe sobre actividad económica.

"A medida que se incorpore nueva información, se conozca la persistencia de la Covid-19 y el impacto sobre la evolución de la actividad, podrá revisarse el tratamiento del dato de caída como un ´outlier´ aditivo (dato atípico) y, eventualmente, modificarse para ser ´modelizado´ como un fenómeno ya no puntual, sino con efectos transitorios o permanentes en el nivel de actividad", señaló el organismo.

De los dieciséis sectores económicos relevados, el organismo detectó que el único que mostró una variación positiva fue agua, gas y electricidad, con un 6,7% de suba interanual.

El derrumbe fue ocasionado principalmente por las bajas en la pesca 48,6%, construcción 46,5%, hoteles y restaurantes 30,8%, industria manufacturera 15,5%, transporte y comunicaciones 14,8% y servicios comunitarios y personales con 12,5%, todos cayendo más que el nivel general.

Le siguieron el comercio mayorista y minorista con un 11,2% de contracción, servicios sociales y de salud 9,3%, agricultura y ganadería 8,1%, actividad inmobiliaria 7,3%, intermediación financiera 4,1%, minas y canteras 3,1%, enseñanza 1,2% y administración pública y seguridad 0,8%.