EEUU perdió 20 millones de empleos en abril
Mientras se multiplican las fosas comunes (foto), la tasa de desocupación se disparó al 14,7%, un nivel sólo visto en la crisis del '30
9 de mayo de 2020
El desempleo en los Estados Unidos se disparó a tasas récord en pocas semanas como consecuencia del impacto de la pandemia en distritos clave como Nueva York y alrededores.
La tasa de desempleo alcanzó 14,7% en abril, la más alta desde la Gran Depresión 1930, al desaparecer 20,5 millones de empleos en la caída mensual más grave desde que se llevan estadísticas.
Turismo, bares y restaurantes y cafeterías fueron los rubros que más tendales dejaron en la calle. Uno de los principales desafíos del sistema laboral estadounidense es que tiene leyes muy flexibles que permiten a los empleadores despedir sin demasiados costos, a diferencia de lo que ocurre, por ejemplo, en la Argentina. Eso le otorga una gran flexibilidad a los sistemas de contratación cuando la economía se expande, pero en un escenario de pandemia puede convertirse en una catástrofe social que se sumará a al sanitaria (foto de fosas comunes).
Pese a todo, las principales acciones en Wall Street, y también en Europa, cerraron con un alza de casi dos puntos debido a la expectativa que genera la reapertura de la economía y la reactivación de las empresas que permanecieron paradas por el coronavirus.
Las cifras difundidas por el Departamento de Trabajo estadounidense revelan de la manera más cruda el daño causado por la pandemia a una economía ahora destruida. Las pérdidas reflejan una grave recesión provocada por los cierres de empresas en casi todos los sectores. En un mes se desvaneció el crecimiento registrado durante los 11 años que siguieron a la Gran Recesión.
El informe considera que hasta el 90% de los empleos perdidos en abril son un fenómeno temporario, debido a que los comercios que se vieron obligados a cerrar bruscamente esperan reabrir y reincorporar a sus despedidos.
Sin embargo, el regreso de esos trabajadores a sus empleos en un futuro dependerá de en qué medida los gobernantes, los empresarios y el público sean capaces de manejar la respuesta al coronavirus.
El informe del gobierno advierte que muchas personas que perdieron el empleo en abril pero no buscaron trabajo ni siquiera están incluidas en la tasa. El impacto de las pérdidas se reflejó en la caída de la proporción de estadounidenses en edad laboral que tienen trabajo: apenas 51,3%, la más baja desde que se llevan estadísticas.
Además de los nuevos desocupados, 5,1 millones de personas sufrieron la reducción de la jornada laboral en abril, lo que redunda en sueldos mas bajos, menor gasto y la consiguiente profundización de la caída de la economía. El indicio de subempleo -trabajo precario- también alcanzó una cifra récord de 22,8%.
Aunque algunos negocios empiezan a reabrir en ciertos estados, las fábricas, hoteles, restaurantes, resorts, arenas deportivas, cines y muchos negocios pequeños siguen cerrados. Los millones de despidos han trastornado las vidas de las familias en todo el país.
El presidente Donald Trump, quien enfrenta una perspectiva de alto desempleo hasta las elecciones de noviembre, se mostró confiado en que se recuperarán. “No es una sorpresa. Todo el mundo lo sabe. Ni siquiera los demócratas me están culpando por esto. Hemos tenido que cerrar la economía artificialmente”, afirmó.
Y agregó: “Lo que puedo hacer es recuperarlo. Los empleos regresarán, y regresarán muy pronto. Y el año que viene tendremos un año fenomenal”, afirmó optimista.
Pero los economistas no son tan optimistas como las necesidades políticas de Trump: temen que se tardará años eb recuperar los empleos perdidos. La Oficina de Presupuesto del Congreso pronostica una tasa de desempleo de 9,5% para el fin de 2021.
La actividad lleva paralizada en Estados Unidos desde mediados de marzo cuando comenzaron a aplicarse medidas extraordinarias de confinamiento, restricción de la movilidad y cierre de actividades para contener la expansión del brote del coronavirus.
El primer cálculo de evolución del Producto Bruto Interno (PBI) del primer trimestre del año registró una contracción del 4,8 %, pero se espera que las cifras del segundo trimestre sean aún peores.
La bolsa de Nueva York, pese a la mala noticia, se mostró optimista en virtud de la decisión de varios estados de comenzar a reabrir la economía. El mercado apuesta a que lo peor de la crisis ya pasó. El Dow Jones Industrial Average cerró en 1,91% arriba y el Nasdaq 1,58%. Las bolsas europeas también subieron tras haberse relajado la tensión comercial entre EE.UU. y China, lo que ha compensado el fuerte aumento del desempleo en la economía estadounidense. Fránkfort tuvo un alza del 1,35 %, Milán del 1,13 %, y París del 1,07.