“Es nuestra intención llegar a un acuerdo con nuestros acreedores”, sostuvo el titular del Palacio de Hacienda. Habría tiempo hasta el 20 de mayo para evitar un default
El ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró que "restaurar la sostenibilidad de la deuda es política de Estado y Argentina está unida en este proceso”.
El ministro abrió por videoconferencia el seminario “Argentina, entre el Covid-19 y la crisis de deuda soberana”, en la Universidad de Columbia. “Un acuerdo sostenible también es necesario para una relación sana y duradera con nuestros acreedores”, afirmó.
Guzmán brindó una videoconferencia en la Universidad de Columbia, donde explicó el proceso que lleva adelante la Argentina para reestructurar su deuda pública externa, en medio de la emergencia global declarada por la pandemia del coronavirus.
La conferencia virtual, titulada "Argentina, entre el Covid-19 y la crisis de deuda soberana", estuvo dirigida por Victoria Murillo, profesora de Ciencias Políticas del Instituto latinoamericano de esa casa de estudios, y contó con la participación del profesor y director del Centro para el Desarrollo Sustentable de la Universidad de Columbia, Jeffrey Sachs, y del profesor de Economía, Martín Uribe.
Sachs integra el grupo de 138 economistas de la élite mundial -entre los que figuran los premio Nobel Josephs Stiglitz y Edmund Phelps- que hoy respaldaron abiertamente la estrategia de renegociación de la deuda, en una carta abierta en la que instaron a los tenedores de bonos a adoptar un “enfoque constructivo” ante la oferta presentada por el gobierno argentino.
Guzmán dividió su presentación en dos partes: por un lado, explicó la estrategia adoptada por el gobierno argentino para hacer frente al COVID 19- en el contexto de “una economía sumamente frágil”; y, por el otro, hizo un repaso del proceso de resolución de la crisis de deuda en medio de la pandemia.
En el arranque de la conferencia, el ministro trazó un panorama de la situación de grave fragilidad económica derivada de la pandemia del COVID-19. “El brote epidémico encuentra a la Argentina en una de las recesiones más largas y profundas de su historia", afirmó Guzmán.
En cuanto al proceso de resolución de la deuda, reiteró que ésta es “no financiable, inasequible e insostenible”, y repasó los puntos centrales de la oferta presentada a los bonistas, que contempla 3 años de gracia, una quita de 5,4% sobre el capital adeudado (u$s 3600 millones) y una reducción de intereses del 62%, equivalente a u$s 37.900 millones.
Guzmán insistió en la necesidad de restablecer un camino sostenible para la deuda y sostuvo que la propuesta argentina está en línea con el análisis técnico realizado por el FMI, que estableció que la reestructuración requiere una contribución apreciable de los acreedores privados para restaurar la sostenibilidad de la deuda.
“Sin reestructuración de la deuda, el valor de la deuda del gobierno de Argentina se encontrará en una senda divergente”, advirtió el ministro.
“Algunos acreedores han aceptado la oferta que hicimos y otros están tratando de alcanzar un acuerdo. Todavía tenemos tiempo, pero es vital restaurar la sostenibilidad de la deuda”, afirmó. El titular del Palacio de Hacienda también dejó en claro que “en el contexto del coronavirus, una mayor austeridad (como reclaman los acreedores) sería desestabilizante”.
Además, destacó el apoyo de toda la Argentina al proceso de reestructuración de la deuda e hizo hincapié en el aval de los gobernadores, intendentes y el Congreso Nacional: “Es una política de Estado y es necesaria para que la Argentina tenga un futuro sostenible”, indicó. “Restaurar la sostenibilidad de la deuda es política de Estado y la Argentina está unidad en este proceso”, afirmó.
A su turno, Jeffrey Sachs elogió la estrategia para renegociar la deuda encarada por la Argentina. “El Gobierno está siendo muy profesional, está haciendo una oferta seria. Lo siento por los acreedores, pero sin son despiadados van a sufrir un choque con la realidad, no hablamos solo de la Argentina sino de una crisis global”, aseguró el economista.
En otro tramo de su exposición, Guzmán se refirió a las medidas implementadas por el Gobierno para evitar la propagación del coronavirus. Resaltó la efectividad del aislamiento social y obligatorio dispuesto por el Gobierno, pero también remarcó el “gran costo” que esta decisión tuvo en términos económicos.
Hizo hincapié en los principios a los que se ajustó la estrategia argentina para enfrentar la pandemia. “Proteger la salud y la vida humana es y debe seguir siendo prioridad número", señaló, al tiempo que destacó la decisión del Gobierno de poner el foco en los sectores más vulnerables y en preservar el capital organizacional de las empresas.
Explicó las distintas políticas implementadas para enfrentar el impacto económico del COVID-19. Resaltó el Programa de Asistencia al Trabajo y la Producción (ATP), el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) que, según dijo, evitó una caída transitoria de “2.1 millones de personas en la pobreza y 2.7 millones en la indigencia”, y el refuerzo a la seguridad social.
“Tuvimos que implementar todas estas políticas al mismo tiempo, en un contexto de reestructuración de la deuda y sin acceso a los mercados, pero las medidas demostraron ser efectivas”, enfatizó.
Al finalizar su exposición, el ministro Guzmán respondió las preguntas de los participantes de la videoconferencia.