Vuelve el dólar turista y los servicios contratados afuera tendrán recargo
Los abonos de Netflix, Amazon, Movistar Play, FOX y otros similares quedarán alcanzados por el recargo que rondará el 20%. Buscan cuidar reservas en un escenario de cuasi default
14 de diciembre de 2019
Si los argentinos penaban por los tarifazos aplicados en el Gobierno de Mauricio Macri, ahora sus angustias se profundizarán a partir de inminente decisión de volver a aplicar, como durante el cepo de Cristina Kirchner, un recargo que rondaría el 20% para el turismo en el exterior y los servicios contratados con compañías como Netflix, Amazon, Movistar Play, Fox y otras decenas vinculadas al entretenimiento y los servicios.
Se deberá pagar un dólar más alto en el caso que se contraten servicios en el exterior, como ocurre con la mayoría de los vinculados al mundo internet, como los servidores.
En la Argentina, grandes empresas y pymes suelen contratar servidores en Estados Unidos o Brasil, porque los locales son considerados de baja calidad, y regular y acodatadas prestaciones.
Para todo esto los costos se dispararán al menos un 20% (y podrían llegar hata 35%), teniendo en cuenta que el Gobierno de Alberto Fernández estima aplicar una especie de desdoblamiento cambiario, por el cual las importaciones (sea para turismo o servicios), habrá que pagarlas a niveles que dólar rondarán entre los $ 75 y los $ 85.
Es una medida aún más severa que la aplicada durante el cepo cambiario de Cristina Kirchner entre 2011 y 2015, ya que en esa epoca el dólar para turismo estuvo subsidiado, lo cual fue muy criticado por los economistas, porque permitió una multimillonaria fuga de divisas.
El objetivo es defender a capa y espada los alrededor de US$ 13.000 millones de reservas de libre disponibilidad que Alberto Fernández heredó de Mauricio Macri.
Fue la primera vez desde el 2011 -cuando Cristina sucedió a su fallecido marido Néstor Kirchner- que un gobierno le deja reservas al próximo. Aunque en este caso también se dejó un enorme endeudamiento, que llegará a fin de año a casi el 100% de un Producto Bruto que cayó casi 80 puntos medida en dólares, a raíz de la fuerte depreciación del peso.
Se estima que al finalizar 2019, el Producto calculado por el INDEC se ubicará en torno a los US$ 350.000 millones.
Cómo sería el recargo
La idea que se maneja al más alto nivel oficial es aplicar un recargo de al menos el 20% a la cotización del dólar oficial?.
Si se realiza un gasto de 100 dólares en el exterior, en lugar de calcularlo en pesos a un tipo de cambio de 63 (cierre de este viernes) debería calcularse un tipo de cambio de 75,6 pesos.
Si el recargo fuera del 25%, ese dólar “turista” cotizaría a casi 79 pesos. A su vez, si el recargo se definiera en el 35%, se estaría hablando, hoy, de un dólar turista de 85 pesos. La intención es reducir drásticamente la pérdida de reservas originada por los gastos de argentinos en el exterior, tanto los que viajan fuera del país como los que realizan compras a través de diversos sitios en internet.
Este “recargo” alcanzaría a los pasajes aéreos, hoteles y todo tipo de gasto que se realice con tarjeta en el exterior. Entre estas compras, por ejemplo, los abonos de Netflix, Spotify, Amazon o lo que fuere que se pague a un proveedor en el exterior.
Como Alberto Fernández ratificó el drástico cepo cambiario aplicado por Mauricio Macri, la opción de hacerse de divisas en efectivo está reducida a solo 200 dólares por mes y por contribuyente.
La otra opción es ir al blue (habrá que ver a qué precio salta la cotización cuando aparezca en escena el dólar turismo) o el dólar bolsa.
Este vienes, contra un oficial de 63 pesos, se pagaba cerca de 70 por el dólar blue?, y entre 72 y 74 los dólares bolsa. Durante el segundo gobierno de Cristina Kirchner se aplicó un recargo a los dólares que se consumían fuera del país, pero era considerado a cuenta del impuesto a las Ganancias.
Se aplicó en marzo de 2013 y arrancó con una alícuota del 20%. Pero luego saltó al 27% y terminó en el 35%. Las alícuotas fueron elevándose a medida que se acentuaba el retraso cambiario.
Los contribuyentes inscriptos en Ganancias lo recuperaban porque cargaban dicho recargo en la declaración mensual (la misma en la que se vuelcan el gasto en medicina prepaga y salario doméstico). Los monotributistas, debían esperar un año para que se les devolviera el monto retenido. Pero en cualquier caso, el recargo funcionaba como anticipo. En cambio, lo que estaría buscando el Gobierno de Alberto Fernández es que lo que paguen los contribuyentes quede en las arcas públicas.
Un repaso a la balanza turística señala que en 2016 por la vía de viajes al exterior y compras desde aquí en sitios del extranjero, se llegó a un déficit de 8.500 millones de dólares.
En 2017, con un atraso cambiario más marcado, el déficit saltó a los 10.600 millones. En 2018, a pesar de la fuerte devaluación de abril y agosto, el rojo resultó de 8.000 millones de dólares. Y en lo que va de 2019 el déficit alcanza los 5.000 millones de dólares.
El Banco Central atesora reservas totales por cerca de 44.000 millones de dólares. Sin capacidad de financiarse en los mercados de capitales, y caída la posibilidad de acceder a desembolsos pendientes del FMI por 11.000 millones de dólares, la única que queda es apostar al superávit comercial (ingreso de dólares) y cerrar todos los grifos por donde se puedan ir los dólares que no son estrictamente necesarios para mantener la actividad productiva.