El ex campeón mundial de ajedrez y otros dirigentes opositores rusos, fueron demorados en Moscú, cuando iba a participar de una marcha contra el gobierno de Putin
El ex campeón mundial de ajedrez Gary Kasparov y otros líderes opositores rusos fueron detenidos en el aeropuerto Sheremetievo-1 de Moscú cuando se disponían a viajar a la ciudad de Samara para participar en una protesta contra la política del Kremlin.
"A Kasparov y a otros dirigentes les retiraron la documentación. Él, junto a una veintena de personas, entre ellos varios periodistas, permanece detenido en la sala de espera de la terminal aérea", dijo en una conversación telefónica Marina Litvinovich, portavoz del ex campeón mundial de ajedrez.
Además de Kasparov, fueron detenidos el escritor Eduard Limonov, líder del prohibido Partido Nacional Bolchevique, y Lev Ponomoriov, dirigente del Movimiento pro Derechos Humanos, todos ellos miembros de la coalición opositora 'La Otra Rusia'.
Los dirigentes opositores tenían previsto participar en la 'Marcha de los disidentes' convocada en Samara con motivo de la cumbre entre Rusia y la Unión Europea, que se celebra en las afueras de esa ciudad a orillas del río Volga.
Las autoridades de Samara autorizaron la 'Marcha de los disidentes', a diferencia de ocasiones anteriores en otras ciudades, cuando las manifestaciones fueron reprimidas violentamente. La canciller alemana y presidenta de turno de la Unión Europea, Angela Merkel, hizo un llamamiento al Gobierno ruso a permitir la celebración de las manifestaciones de la oposición en Samara.
Es la segunda vez en apenas un mes que Kasparov es detenido por las autoridades rusas. La primera fue el 14 de abril, tras participar en Moscú en una manifestación contra el presidente Putin prohibida por el Ayuntamiento moscovita. En aquella ocasión, el líder del Frente Cívico Unido fue puesto en libertad tras pasar cinco horas en una comisaría y pagar una multa de 1.000 rublos -unos 30 euros-.
La marcha de Samara es la sexta organizada por 'La Otra Rusia 'en los últimos cinco meses y, al igual que las anteriores, fue convocada para protestar por las violaciones de los derechos y libertades fundamentales, y por la reforma de la ley electoral, que según la oposición priva a los rusos de unos comicios libres.