La firma decidió empezar a importar desde Brasil. La decisión representa un duro golpe para la industria. Se agrava la crisis en el sector fabril
La empresa Metalpar, dedicada al carrozado y a la fabricación de camiones y colectivos, cerró las puertas de su planta en Loma Hermosa.
Tras el cierre, 500 operarios quedaron en la calle junto al personal de maestranza, del comedor y de seguridad. Durante 2018, la firma había concretado suspensiones y el cesanteos de 150 trabajadores
De acuerdo a la información de su página web, Metalpar “es una empresa chilena con filial en Argentina dedicada actualmente a la importación de buses en su casa matriz y al carrozado de autobuses urbanos e interprovinciales en Argentina”. En Chile, sin embargo, desde hace 3 años, la compañia dejó de fabricar buses para importarlos directamente desde China.
Según la información brindada por el portal InfoGremiales, en 2017, tanto el SMATA como la empresa le plantearon al Gobierno establecer un programa de producción sustentable.
En ese marco, “se estableció un programa para la fabricación, productividad, calidad y costos, pero no se puede llevar a cabo porque las empresas transportistas argumentaron problemas financieros. A un año y medio de ese fracaso, la firma baja la persiana”.
Por la caída de las ventas, la firma había reducido personal el año pasado y de esta manera encendió las alarmas en el gremio y en diferentes actores del sector, que le pidieron al Gobierno nacional medidas concretas para lograr la reactivación.
En un encuentro con la Dirección Nacional de Relaciones Laborales, en mayo del año pasado, la empresa le había comunicado a SMATA que evaluaban la posibilidad de cierre.
En octubre de 2017, tanto la firma como el gremio, le plantearon la situación a las autoridades nacionales, con el objetivo de establecer un programa de producción sustentable.
Por eso establecieron un programa para la fabricación, productividad, calidad y costos, pero no se pudo realizar porque las empresas transportistas argumentaron problemas financieros. A un año y medio de ese fracaso, la firma baja la persiana.