El Papa hizo un pedido de "renovación" para la Iglesia, frente al riesgo de "parecerse a un museo", al tiempo que reclamó más unidad entre sus miembros
"La vida sin asombro se vuelve gris, rutinaria; lo mismo sucede con la fe. Y también la Iglesia necesita renovar el asombro de ser morada del Dios vivo, Esposa del Señor, Madre que engendra hijos", reclamó el pontífice este martes al celebrar en la Basílica de San Pedro la misa en ocasión de la 52a. Jornada Mundial de la Paz.
"De lo contrario, corre el riesgo de parecerse a un hermoso museo del pasado", advirtió en esa dirección, retomando un reclamo que inició en su primer escrito como papa, la exhortación apostólica de 2013 Evangelii Gaudium.
Durante su homilía, la primera luego de haber desplazado a su ahora ex vocero Greg Burke, Bergoglio planteó que "la Virgen nos arraiga en la Iglesia, donde la unidad cuenta más que la diversidad, y nos exhorta a cuidar los unos de los otros".