El fiscal Carlos Stornelli viajó a la casa de un allegado al chofer para buscar las anotaciones. La causa está bajo secreto de sumario pero impacta por las consecuencias políticas
Luego de que el remisero de Roberto Baratta, Oscar Centeno, declarara que las anotaciones fueron hechas por él, el fiscal del caso, Carlos Stornelli, lo trasladó a la casa del hombre en Olivos, en donde buscaron la llave de otro domicilio en otra localidad de la provincia de Buenos Aires, donde están los cuadernos originales.
Sucede que la Justicia nunca tuvo los escritos, ya que le fueron entregadas fotocopias. Ahora, luego de que Centeno ratificara todo lo que dieron a conocer los medios de comunicación, fue dejado en libertad y se acogerá a la ley del arrepentido.
Una de sus primeras acciones fue llevar al fiscal a la casa donde están los cuadernos, que están en manos de un allegado al ex chofer.
A su casa de Olivos Centeno arribó en un auto negro, polarizado y con los vidrios tapados para que no lo captaran las cámaras. En ningún momento se bajó, sino que los oficiales de la Policía Federal abrieron el garaje de la casa para que el arrepentido ingresara con el auto.
Cuando arribó a la otra dirección, el ex chofer ingresó fuertemente custodiado por oficiales. Previo a él, ingresó a la vivienda Stornelli con la llave que en principio lo llevará a los cuadernos con el detalle de todas las coimas que manejaron Roberto Baratta y Julio De Vido, entre otros, para Néstor y Cristina Kirchner.
Ahora, Centeno quedó alojado allí con custodia policial y Stornelli ya se retiró. Al irse de Olivos, Stornelli se limitó a decir que no podía hablar porque la causa "está en secreto de sumario". "Estamos trabajando y en secreto, no se puede", insistió.
Esta mañana, en la fiscalía de Stornelli, Centeno expresó: "Los cuadernos son míos, yo los escribí". También explicó por qué escribió los textos y ratificó que hasta ayer trabajó "como chofer" de Roberto Baratta.
Luego de la declaración, fue llevado ante el juez Claudio Bonadio para homologar el acuerdo por el cual acordó acogerse a la figura del imputado colaborador.