Antes de entregarse, la policía derrumbó con ayuda de los bomberos la puerta blindada de su domicilio, pero no lo halló. Wagner fue titular de la Cámara del sector durante el kirchnerismo y está mencionado en el circuito de sobornos. Ya había sido procesado por el caso Odebrecht
Un día después de que el juez Claudio Bonadio ordenara su detención, Carlos Wagner -dueño de Esuco y ex presidente de la Cámara de la construcción-, se entregó ante la justicia.
Deberá declarar ante el magistrado y el fiscal Carlos Stornelli.
El empresario integra la lista de los detenidos en la causa que investiga un circuito de coimas que involucra al extinto Ministerio de Planificación y referentes del empresariado de la construcción y del sector energético. Hasta el miércoles a la noche, eran seis las personas que tenían orden de detención y que no se habían concretado. Entre ellos, Wagner. Uno de los empresarios más emblemáticos de la obra pública K.
Wagner figura en los ocho cuadernos entregados a la justicia en los que, como si fuera una bitácora de viaje, Oscar Centeno -ex chofer de Roberto Baratta- consignó durante varios años -con una interrupción de tres años-, los sospechosos movimientos del ex funcionario y cómo se movía el dinero sospechado de ser producto de coimas. Ya están detenidos, también, otros seis empresarios: Gerardo Ferreyra (Electroingeniería), Javier Sánchez Caballero (IECSA), Jorge Neira (Electroingeniería), Armando Roberto Loson (Grupo Albanesi), Carlos Mundin (BTU) y Claudio Glazman.
También tienen pedido de captura Juan Carlos Goycochea (ex Isolux) y Francisco Valenti (Pescarmona).
Hace 24 horas la policía ingresó al domicilio del dueño de Esuco en Puerto Madero. Una puerta blindada que tuvo que ser derribada con la ayuda de los bomberos, pero no logró dar con él hasta que sus abogados informaron al juzgado que se entregaría este jueves, tal como ocurrió. Goycochea se comunicó con la Justicia y dijo que se entregará cuando termine de esquiar en sus vacaciones de invierno. Sin embargo, se especula que el juez no será flexible con ellos y podría dictar la orden de captura en cualquier momento.
Este empresario es una ex autoridad de Isolux Argentina, firma ganadora de la construcción de la Usina Termoeléctrica de Río Turbio.
A los empresarios se los investiga como parte de un entramado de sobornos que, según el fiscal Carlos Stornelli, constituye una gran "asociación ilícita" con Cristina Kirchner a la cabeza, junto a Julio De Vido y Roberto Baratta en rol de organizadores.