Decidido a defender un nuevo rol de las Fuerzas Armadas, el presidente Mauricio Macri dio un fuerte mensaje a los altos mandos militares.
"Tengo el profundo compromiso de saldar la deuda histórica que tenemos con las Fuerzas Armadas de la democracia", afirmó.
Macri encabezó la comida anual de camaradería con las Fuerzas Armadas en el salón de honor del edificio Libertador. "Nos acusan de vulnerar los consensos democráticos de defensa. Pero no es así. Los invitamos a todos a debatir, a sumarse al trabajo en conjunto. Estas son las Fuerzas Armadas de todos los argentinos", declaró el Presidente, al referirse a las críticas formuladas por sectores de la oposición y de organizaciones de derechos humanos.

Dijo que se necesita "trabajar juntos en este proceso de reconversión, pensando en el presente y, sobre todo, en el futuro de nuestras fuerzas militares", antes de brindar por el país.
En la mesa principal estuvieron el ministro de Defensa, Oscar Aguad; el jefe del Estado Mayor Conjunto, teniente general Bari del Valle Sosa; los jefes del Ejército, general Claudio Pasqualini, de la Armada, vicealmirante José Luis Villán, y de la Fuerza Aérea, brigadier general Enrique Amrein; el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y el presidente provisional del Senado, Federico Pinedo.
"Este proceso de transformación no es fácil: tenemos un sistema nacional de defensa desactualizado, luego de varias décadas sin inversión y la ausencia de políticas de largo plazo", sostuvo el jefe de Estado.
Dijo que la Argentina requiere un moderno despliegue territorial de las Fuerzas Armadas acorde con esos desafíos actuales.