Luego de la histórica cumbre entre el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un, y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, el republicano brindó una conferencia de prensa en la que contó detalles de la reunión.

El mandatario estadounidense dijo que se trató de un encuentro "sincero, directo y productivo", destinado a alcanzar la desnuclearización de la Península Coreana.

Tras la firma del "exhaustivo" documento, Trump aseguró que el proceso de desnuclearización ocurriría "muy, muy rápido" y agregó que había establecido un "vínculo especial" con Kim y que la relación con Corea del Norte sería muy diferente.

"La gente va a estar muy impresionada y va a estar muy contenta. Vamos a encargarnos de un problema muy peligroso para el mundo", ha explicado el presidente estadounidense.

Ante la pregunta de si invitará a Kim a la Casa Blanca, Trump respondió: "Por supuesto que lo haré". El republicano aseguró que Kim es "muy inteligente" y un negociador "muy duro" y "muy respetable".

Por su parte, Kim dijo que los dos líderes tuvieron una reunión histórica "y decidieron dejar atrás el pasado. El mundo verá un cambio importante".

Durante un paseo después del almuerzo a través de los jardines del hotel de Singapur donde se celebró la cumbre, Trump dijo que la cumbre había sido "mejor de lo que cualquiera podría haber esperado".