21 de noviembre de 2024
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Hinchas del Barcelona llaman "peseteros" a jugadores
Es por haber quedado eliminados de la Copa del Rey ante el Getafe por 4-0, pese a haber ganado 5-2 en el primer partido. Los ánimos están caldeados por el Camp Nou
11 de mayo de 2007
La plantilla, que saltó al campo de La Masía a las 12,25 horas, después de mantener una reunión en el vestuario de casi media hora con el cuerpo técnico, el presidente del club, Joan Laporta, y el secretario técnico, Aitor 'Txiki' Begiristain, fue recibida con pitos por un centenar de aficionados con ganas de descargar su ira contra los jugadores después del ridículo que hicieron en el Coliseum Alfonso Pérez.
"Peseteros", "sinvergüenzas" o "vagos" fueron algunos de los calificativos que los aficionados culés utilizaron como arma arrojadiza contra la plantilla azulgrana, en un entrenamiento en el que todo eran caras largas y en el que ni siquiera Ronaldinho, que se entrenó con sus compañeros en lugar de quedarse en el gimnasio como hace habitualmente el día después del partido, se libró de las críticas. Alguno le pidió que dejase de "engañar" al club que le paga y se marchara de una vez al Milan.
El delantero azulgrana, cuya comparecencia ante los medios de comunicación estuvo supervisada por el capitán, Carles Puyol, presente en la sala de prensa, se quedó sin argumentos cuando se le preguntó los motivos por los que el Barça firmó un partido tan desastroso. "Me gustaría explicar lo que pasó, pero no he dormido preguntándomelo y no sé qué decir. Cualquier equipo puede perder un partido, pero no puede dar la imagen que dimos nosotros", lamentó.
Totalmente abatido, pidió perdón "por haber hecho sufrir" a la afición culé, aseguró que el equipo está pasando por "un momento muy duro" y pidió al público que "llene a reventar" el Camp Nou ante el Betis y demuestre que, pese a todo, sigue confiando en esta plantilla.
"Tengo ganas que llegue el domingo, ojalá que el partido se jugase ya mañana. Si el técnico me pone, tengo más claro que nunca lo que tengo que hacer", adelantó el camerunés, quien dijo entender la duras portadas publicadas hoy por los diarios deportivos y a los aficionados que han increpado e insultado a los jugadores durante el entrenamiento de hoy, "porque tienen toda la razón".
Pese a todo, el punta africano dijo tener "plena confianza" en sus compañeros y se mostró convencido que la Liga no se va a escapar. "La temporada no se ha terminado. Nos quedan cinco partidos, que serán cinco finales y los rivales deben saber que así las vamos a afrontar".
Samuel Eto'o considera que este Barça aún tiene crédito y se mostró molesto por la euforia que se vive en el Real Madrid, donde ya dan por hecho que la Liga finalmente se teñirá de blanco.
"En mi país decimos que 'hasta un león muerto asusta', y este equipo, desde hace tres o cuatro años siempre ha estado allá arriba y lo seguirá estando. Si ganamos tres Ligas seguidas, que sigan hablando. Ahora, lo que quiero es ganar mis cinco partidos, y luego, que me vuelven a poner una multa", comentó el delantero azulgrana, quien de este modo dejaba entrever que no le importaría volver a ser sancionado por el club por insultar al eterno rival en una celebración liguera como ocurrió hace dos años.
Durante el entrenamiento, varios seguidores recriminaron a Frank Rijkaard,que no se mostrara más duro con sus futbolistas. El técnico holandés, que parecía ajeno a todo este ambiente enrarecido, aprovechó la sesión para hacer un breve aparte con los futbolistas con más peso en el equipo como Ronaldinho o Samuel Eto'o. El hermano y representante de Ronaldinho, Roberto de Assís, también se pasó por el entrenamiento. Una visita tal vez inoportuna después del indolente partido que ayer hicieron Ronnie y sus compañeros en Getafe.