Igualaron 3-3 en Parque de los Patricios. Pussetto, Mendoza y Chávez marcaron para el local; Mas, Bou y Benítez lo hicieron para el campeón de la Superliga
Con un equipo alternativo, el ganador de la Superliga Boca, empató 3 a 3 con Huracán, que deberá esperar los resultados de sus competidores para saber si conseguirá un lugar en la próxima edición del principal certamen de clubes del continente.
Tras el empate ante Gimnasia que otorgó el título, todos los cañones del equipo de Guillermo Guillermo Barros Schelotto apuntan al cotejo del miércoles ante los peruanos en el que se jugará el pase a los octavos de final del certamen continental, por eso el DT dio licencia hasta el domingo a los habituales titulares.
Después de una previa sumamente emotiva, que incluyó un reconocimiento para Daniel Montenegro, que jugaba su último partido como profesional (le entregaron una plaqueta, un banderín y una camiseta enmarcada) y un sentido minuto de silencio por el fallecimiento del uruguayo Hugo Romeo Guerra, quien vistió ambas casacas, el Globo arrancó muy decidido a quedarse con ese triunfo que tanto necesitaba.
En un campo de juego en muy mal estado, con el césped muy largo y el terreno embarrado y con agua acumulada, el conjunto dirigido por Gustavo Alfaro pegó en su primera aproximación riesgosa. A los 6 minutos y después de una maniobra previa en la que todo Boca reclamó una infracción de Ignacio Pussetto sobre Emmanuel Mas, Montenegro asistió al ex jugador de Atlético de Rafaela, que enganchó ante el debutante Gonzalo Goñi y batió con un zurdazo a Guillermo Sara.
La ventaja no quitó ímpetu a la búsqueda del local, que antes de que se cumpliera el cuarto de hora inicial dispuso de dos ocasiones clarísimas para ampliar su ventaja, pero Guillermo Sara respondió bien primero ante Nicolás Silva y luego frente a Montenegro.
Después de ese cuarto de hora furioso del Globo, Boca empezó a hacer pie en un terreno que no ayudaba para ello al punto que Gago, quien volvía a jugar tras siete meses de inactividad por una rotura de ligamentos en su rodilla derecha, discutió airadamente con el árbitro Fernando Rapallini y hasta amenazó con retirar a su equipo del campo.
Tras avisar con un cabezazo de Mas apenas alto y un tiro libre de Edwin Cardona que Marcos Díaz envió al córner, la visita alcanzó la igualdad a los 31 minutos: un córner de Emanuel Reynoso desde la derecha fue conectado por Mas, quien ganó muy bien arriba y dejó clavado a Marcos Díaz.
Y en tres minutos, Boca calentó el ambiente. Porque enseguida le asestó otro sopapo al equipo de Alfaro. Gago, quien con pinceladas dejó en evidencia su calidad, profundizó con Junior Benítez y el ex jugador de Lanús prolongó para que Walter Bou, con un disparo rasante entre las piernas de Marcos Díaz dio vuelta el marcador.
Más allá de las intervenciones del electrizante Pussetto y el aporte de Montenegro, el conjunto de Parque de los Patricios sintió el impacto, se desinfló y perdió la profundidad que había tenido en el arranque. Para colmo su defensa no daba garantías, sobre todo en balones aéreos.
A los 42 minutos Junior Benítez estrelló un cabezazo contra un poste tras un córner de Cardona. Y enseguida el hombre del rodete se tomó revancha: luego de un centro desde la izquierda de Reynoso, apareció muy libre en el borde del área chica y sometió a Marcos Díaz para cerrar el primer tiempo de una forma muy distinta a como había comenzado.
El arranque del complemento no perdió intensidad. Huracán tuvo la primera a los 8 minutos con un cabezazo apenas desviado del paraguayo Saúl Salcedo (había partido apenas adelantado), justo antes de que Montenegro se llevara la última ovación al ser reemplazado por Andrés Chávez. Tras 21 años de trayectoria y 670 partidos, el Rolfi le puso punto final a su carrera.
El partido era de ida y vuelta, con el centro del campo como zona de tránsito rápido. Pudo descontar el Globo con un cabezazo de Silva que fue repelido por el travesaño. Pudo estirar su ventaja Boca con un mano a mano que Marcos Díaz le ganó a Bou.
En esa montaña rusa de emociones el equipo de Alfaro descontó con una involuntaria ayuda arbitral: tras una pifia de Israel Damonte en el área, el balón quedó servido para Chávez. El ex delantero de Banfield remató y Sara tapó, pero Diego Mendoza, que estaba adelantado, empujó a la red.
Y así como había hecho Boca en el primer tiempo, el local también aprovechó el envión que le proporcionó ese grito. A los 25, Sara se lo sacó a Chávez. Pero el goleador tuvo revancha dos minutos después, cuando el incansable Pussetto recuperó una pelota muy difícil junto al banderín del córner y conectó con Pablo Álvarez. El centro del lateral aterrizó en la cabeza de Chávez, que batió a Sara y estampó el 3 a 3. Quedaba tiempo para buscar la hazaña.
Los últimos minutos fueron una moneda al aire, con dos equipos agotados que de todos modos no renunciaron al ataque, como para echar por tierra los rumores sobre un supuesto pacto espurio. Ya en tiempo agregado, Sara, de muy buen desempeño, le arrebató el grito a Pussetto. Y en la contra se lo perdió Junior Benítez. Fueron las últimas de un partidazo.
La igualdad no modificará nada en la vida de Boca. Para Huracán, en cambio, deja en el terreno de la incertidumbre su clasificación a la Libertadores. El Globo quedó cuarto, con 48 puntos y +11 de diferencia de gol, por ahora dentro de los puesto de acceso al certamen continental. Pero puede ser desplazado si ganan dos de sus tres rivales: Independiente (46 y +11, visita a Unión), Racing (45 y +16, recibe a Colón) y Talleres (45 y +13, visita a Olimpo).