En un episodio inaudito, una investigación judicial determinó que entre quienes tiraban piedras el jueves 14 de diciembre último en la Plaza de los Dos Congresos se encontraba un policía.
En un trabajo de identificación basado en videos y fotografías, se descubrió a un policía bonaerense del comando de la patrulla de Escobar, Damián Ferrero, arrojando cascotes a las fuerzas de seguridad que custodiaban las inmediaciones del Congreso, durante la frustrada primera sesión para tratar la reforma jubilatoria. Mientras la Justicia Federal investiga si los violentos incidentes en la Plaza Congreso fueron parte de un eventual “plan” para impedir por la fuerza la sesión de la Cámara de Diputados que iba a votar la reforma previsional, causó revuelo la revelación de que al menos uno de los que arrojaba piedras era un policía bonaerense.
La fiscal de la causa, María Magnano, caratuló el bochorno del lunes como intento de sedición o rebelión y el juez Sergio Torres investiga si los manifestantes que hirieron a 88 policías y causaron destrozos por $ 30 millones en la plaza fueron parte de un “plan” organizado con ese fin.
Torres también identificó, tras una presentación del secretario de Seguridad porteño, Marcelo D'Alessandro, a otro militante conocido como "El karateca”, que se llama César Javier Arakaki a quien le atribuyen haber golpeado con palos a un efectivo de la Policía de la Ciudad caído en la primera fila de contención de la manifestación del lunes. Otros de los manifestantes sospechados de hechos de violencia se llama Cecilia Burgeño y sería la militante del PO que se vio ante las cámaras de TV rompiendo con una maza un banco de la plaza, según las fuentes.
El juez Torres investiga los contactos de los violentos que ya han sido identificados y otros sospechosos, luego de ratificar el pedido de captura del ex candidato del Frente de Izquierda del partido de los Trabajadores de Santa Fe conocido como el “militante del mortero”, Sebastián Romero.
Además de sedición, la Policía de la Ciudad acusó a estos sospechosos de los delitos de atentado, resistencia a la autoridad, daño, lesiones e intimidación pública.