Horas antes de que el presidente Donald Trump reconozca a esa ciudad como capital de Israel, el pontífice había solicitado respetar las resoluciones de las Naciones Unidas
Durante su audiencia semanal de los miércoles, el papa Francisco realizó un llamamiento "desesperado" para que se respete el status quo de Jersulasén, ante los planes del presidente de Estados Unidos Donald Trump de reconocer este miércoles a la ciudad como la capital de Israel.
El pontífice también pidió que se respete el estatus de la ciudad santa, en conformidad a las resoluciones de las Naciones Unidas.
Francisco expresó su "profunda preocupación", tras la intención de Trump de mudar la embajada estadounidense de Tel Aviv a Jerusalén, ya que es la único lugar sagrado para cristianos, judíos y musulmanes.
"Rezo a Dios para que su identidad sea preservada y fortalecida en beneficio de la Tierra Santa, Oriente Medio y todo el mundo", dijo Francisco en la audiencia semanal.