Sólo se quedó con $ 500.000 en efectivo y un plazo fijo por otros $ 250.000. No declaró casas ni autos. La operación llama la atención de la Justicia que la investiga por corrupción
Cristina Fernández les donó el año pasado $ 74 millones a sus hijos, en una operación que la Justicia sospecha busca meter ruido en su insostenible crecimiento patrimonial.
El llamativo movimiento financiero la dejó con un patrimonio declarado de $ 3,5 millones. La ex presidenta no informó casa ni auto a su nombre, según consta en su declaración jurada. Cristina les cedió 26 propiedades, acciones en distintas sociedades y millonarios plazos fijos a Máximo y Florencia. Los movimientos se concretaron el 16 de mayo, tres días después de su primer procesamiento en la causa por el dólar futuro.
Las donaciones ocurrieron, además, 45 días antes de que todos sus bienes quedaran inhibidos por la Justicia, por ese motivo estos cambios patrimoniales son investigados en los tribunales de Comodoro Py.
Los bienes de Cristina ahora se acotan ahora a un crédito por cobrar de la AFIP por $ 2,5 millones, $ 500.000 en efectivo y otros $ 250.000 depositados en un plazo fijo. Tampoco le quedaron deudas: canceló $ 5 millones a pagar con las sociedades Hotesur SA y Panatel.
Sus gastos personales durante 2016 fueron, en promedio, de $ 265.000 por mes.
Su patrimonio, ahora, es el más bajo declarado desde que Néstor Kirchner desembarcó en la Casa Rosada, allá por 2003, cuando informó bienes por $ 7 millones. Las cuentas experimentaron un fuerte incremento después de la muerte de Néstor Kirchner, en 2010, cuando recibió como herencia el 50% de todos sus bienes. La fortuna de la familia siempre se sostuvo con dos pilares: los inmuebles (la mayoría en Santa Cruz) y los millonarios plazos fijos.
Con estas donaciones, Cristina no declara a su nombre ninguna de sus residencias. Su casa en Río Gallegos, su residencia en El Calafate y su departamento porteño en Recoleta. Tampoco su camioneta Honda HRV.
Pero a pesar de las donaciones realizadas el año pasado por su madre, el patrimonio de Máximo Kirchner también disminuyó en 2016. El líder de La Cámpora asegura que perdió $ 8 millones el año pasado, aunque ingresó a su patrimonio decenas de bienes, muchos provenientes de la sucesión de Néstor Kirchner. ¿Donde está el dinero? Máximo Kirchner había declarado que realizó "gastos personales" por $ 20,7 millones. En promedio, el diputado desembolsó $ 1,7 millones por mes. Una diferencia sustancial comparado con 2015, cuando había informado que usaba $ 50.000 mensuales para vivir. Pero cuando la Justicia comenzó a revisar estos movimientos, el diputado corrigió lo declarado como "gastos personales".
También el año pasado, Máximo vació diez plazos fijos por casi $ 20 millones, información que motivó acciones judiciales.
El juez Claudio Bonadio allanó hace dos semanas la sede central del Banco Galicia para obtener más datos sobre los movimientos de fondos del hijo de Cristina en el marco de la causa Los Sauces, en la cual la expresidenta está procesada junto a los empresarios Lázaro Báez y Cristóbal López por haber canalizado supuesto dinero negro a través del pago de alquileres.