Los militantes más radicalizados de la manifestación comenzaron a causas destrozos durante la desconcentracion sobre la avenida de Mayo. Varios insultaron a quienes salían del teatro Avenida
Un grupo de manifestantes provocó incidentes en el centro porteño y ocasionó daños en las fachadas de varios locales comerciales, cuando llegaba a su fin la marcha para reclamar "la aparición con vida" de Santiago Maldonado, en Plaza de Mayo.
Los desmanes comenzaron cuando un grupo comenzó a tirar piedras contra el vallado que resguardaba la Plaza de Mayo y los efectivos de la Infantería de la Policía de la Ciudad empezaron a dispararles balas de goma para desalojarlos.
Con la intervención de efectivos policiales de civil, durante el desalojo de la Plaza hubo varias detenciones, según se pudo observar por las imágenes de televisión.
El balance era de 23 heridos y 17 detenidos.
Los manifestantes, que no estaban identificados pero la mayoría con mochilas, prendieron fuego tachos de basura en la Avenida de Mayo y respondieron durante varios minutos con piedras el accionar de la Policía.
Cerca de las 21:00, cuando ya quedaba muy poca gente en la histórica plaza e incluso se comenzaba a desmontar el escenario, un grupo reducido de personas se acercó hasta la valla que desde 2001 divide la plaza y empezó a lanzar proyectiles contra los agentes y a prender fuego diferentes elementos.
Los policías replicaron disparando balas de goma y luego avanzaron y detuvieron a varios manifestantes, en medio de corridas generalizadas por los alrededores de la plaza, especialmente por la Avenida de Mayo.
Los primeros reportes de la fuerza de seguridad indicaban que hubo una decena de manifestantes detenidos, mientras que había un efectivo policía herido de gravedad.
Además, durante la desconcentración fue atacado el frente del edificio del Círculo de Suboficiales de Gendarmería por un pequeño grupo que se desprendió de la concentración de Plaza de Mayo rompió los vidrios del edificio ubicado en el cruce de las calles Venezuela y Tacuarí, en el barrio de Monserrat.
El Cabildo, la Catedral y la Legislatura porteña también fueron blanco del vandalismo: sus paredes fueron pintadas con innumerables leyendas contra la Gendarmería y el Gobierno de Mauricio Macri.
Sobre la Avenida de Mayo, los manifestantes iniciaron grandes fogatas, encendiendo contenedores de basura ubicados en las cercanías, por lo cual rápidamente desembarcaron en el lugar carros hidrantes de bomberos para apagar las llamas.
Recién cerca de las 22:30 los incidentes amainaron y varios efectivos policiales a bordo de motos terminaron de dispersar a los pocos manifestantes que quedaban en la zona.