Hay más de 3.000 empleos en riesgo si no aumenta su producción. Dicen que le sobran diez plantas. El acuerdo negro con Venezuela
Manuel Ocampo, de la Asociación de Productores de Leche, admite que la crisis de SanCor -que perdió más de $2.400 millones en el último año-, puede ser terminal, al sostener que lo que pierde la tradicional compañía láctea argentina no tiene comparación y castigar los "errores" de administración en la empresa que en realidad funciona como cooperativa.
Mientras surgió el presunto interés del gigante Lactalis en quedarse con la empresa, empezaron a circular datos que meten miedo sobre la realidad, o casi, de la tradicional marca argentina de lácteos.
SanCor tiene 4.700 empleados y los reportes financieros que hace circular expertos financieros, que pueden tener intereses, es que por la producción que alcanza y el total de productos que elabora no debería tener más de 1.000.
Es decir, para algunos sectores que están detrás de la empresa "sobran" 3.700 empleados.
Incluso, un reporte que circula en Córdoba cuyo origen es dudoso sostiene que mientras Nueva Zelanda emplea 12.000 personas para generar 22.000 millones de litros de leche anuales, en la Argentina se elabora menos de la mitad y con 35.000 empleados. El mismo informe, que siempre debería ser tomado con pinzas, sostiene que con SanCor tiene 12 plantas, cuando podría concentrar toda su producción en apenas dos.
Y advierte que no llega a procesar 4 millones de litros de leche por día, es decir en el orden de los 1.400 millones de litros anuales, una cifra muy escasa para toda su capacidad instalada.
En donde sí hay gran coincidencia entre los distintos informes es en que el desastroso acuerdo que Cristina Fernández, Guillermo Moreno y otros 'cráneos' del régimen anterior le hicieron firmar a SanCor con la quebrada Venezuela fue otro factor que llevó a SanCor al borde del precipicio.
A comienzos de 2016, pactó la venta de 40.000 toneladas de leche en polvo. El acuerdo implicaba un desembolso por parte del país comandado por Nicolás Maduro de hasta $ 2.200 millones. La compañía cumplió con las entregas, no así el régimen bolivariano, que ni siquiera canceló el primer cargamento.
Mientras el Gobierno y el gremio del sector le pidieron a la cooperativa SanCor presentar un plan de reestructuración a largo plazo para salir de la crisis que afronta, se conoció hoy que el mayor grupo lácteo del mundo, Lactalis, tiene la mira puesta en la tradicional compañía argentina.
Se trata de un grupo de origen francés que factura unos 17.000 millones de euros anuales y está interesado en comprar a la tradicional cooperativa argentina, que ya cerró cuatro plantas por no poder sostener la actividad.
El canal de diálogo entre Lactalis, que maneja marcas como Parmalat, Président y Lactel, con 220 fábricas y 75 mil empleados, ya estaría abierto con SanCor.
La versión fue difundida por el diario La Nación, pero en la empresa, cuya sede central está en Sunchales, Santa Fe, se negaron a confirmar o negar la existencia de las tratativas.
En 2016, la cooperativa le vendió al grupo local Vicentin, de origen aceitero, el 90% del negocio de yogures, flanes y postres a cambio de 100 millones de dólares. No obstante, SanCor cerró su último ejercicio con una pérdida de 2.421,4 millones de pesos.
Al ser una cooperativa, SanCor no puede venderse, debería ser convertida en una sociedad anónima y ya en 2006, el grupo
Adecoagro ofreció US$ 120 millones para quedarse con el 62,5% de sus existencias con una SA que iba a formarse.
Pero, como en esa época el magnate George Soros tenía una participación importante en Adecoagro, el entonces presidente Néstor Kirchner bloqueó la operación y gestionó para que SanCor tomara un crédito de Venezuela por U$S 80 millones, que fue cancelando con leche en polvo.
Según el ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, la factura impaga de Venezuela por otros negocios a la cooperativa ronda los $ 1.000 millones, o unos 60 millones de dólares.
En el último tiempo, afectada por la inundaciones de la cuenca lechera santafesina, la cooperativa reprogramó pagos a los tamberos, y aún no finalizó de abonar leche de diciembre y enero será cancelado a fines de abril.
De los 1.400 tambos asociados, se habrían ido ya los que producen en total entre 400 y 600 mil litros diarios, así de procesar 2,4 millones de litros pasó a 1,7 millones.