Fue un apretado 1 a 0 pero golpeó al xeneize, que pretende ser protagonista y tiene la presión de su gente. El campeón erró un penal
En el arranque del torneo de Primera División, el campeón Lanús venció a Boca por un apretado 1-0 en el estadio Néstor Díaz Pérez, en un partido cerrado en el que las diferencias se marcaron durante el segundo tiempo.
A pesar de los numerosos refuerzos contratados, Boca arrancó mal ante el último campeón del fútbol argentino.
El equipo de Jorge Almirón fue más equilibrado en la mitad final, contó con un medio juego más sólido y estableció la diferencia con la velocidad de Lautaro Acosta, autor del gol y clave mientras estuvo en la cancha, dado que en la escena de la conquista sufrió una lesión muscular en la cara posterior del muslo derecho que obligó a reemplazarlo.
También fue importante Marcelino Moreno, cuyo ingreso tuvo como consecuencia una superación muy marcada en la ofensiva local.
Boca peleó el partido por momentos de igual a igual, pero en determinadas escenas se lo notó inconsistente en el retroceso, careció de peso en los últimos metros y pagó finalmente por algunos errores defensivos muy visibles.
El primer tiempo se planteó entre dos equipos con ideas parecidas que cuidaron mucho la pelota, trataron de progresar de manera asociada, con Román Martínez conduciendo a Lanús desde el medio juego, con Pablo Pérez y el uruguayo Rodrigo Bentancur correctamente parados por el lado de Boca.
Lanús comenzó ejerciendo presión alta y a los 2 minutos, en la jugada mejor elaborada de toda la etapa, con participación de varios jugadores, el paraguayo Miguel Almirón remató desde fuera del área y Guillermo Sara desvió al córner sobre su izquierda.
Cuando Boca logró pasar a compartir la posesión tuvo un momento favorable en el que contó con dos llegadas propicias. A los 13, recibió Darío Benedetto un muy buen pase de Carlos Tevez, tocó bajo ante la salida de Fernando Monetti y salvó Diego Braghieri en la línea de sentancia. A los 17, hubo una corrida de Cristian Pavón por la derecha que finalizó con un remate cruzado y desviado.
A los 38 minutos, en una pasaje en que a los dos les costaba mucho llegar, el Laucha Acosta encaró por la izquierda, llegó hasta el área y lo tocó Santiago Vergini cometiéndole penal, pero el paraguayo Brian Montenegro lo ejecutó muy mal, con un zurdazo por demás elevado.
La última chance en ese capítulo le correspondió a Boca, a los 43, porque hubo otra aparición de Pavón por la derecha tras pase de Tevez y el disparo buscando el parante más cercano resultó desviado.
La primera ocasion del segundo segmento le correspondió a Boca, porque hubo un tiro libre de Gonzalo Castellani que peinó Tevez y por poco no consiguió conectar Juan Manuel Insaurralde.
Dos minutos más tarde salió mal Vergini, Boca quedó desarmado, Moreno en su primera intervención eludió la salida de Sara y en el remate alcanzó a salvar el colombiano Frank Fabra junto a un palo.
Fue el anuncio de vuelco importante en el desarrollo porque Lanús empezó a hacerse más firme y ordenado, al tiempo que marcaba desequilibrio sobre los dos laterales.
A los 21 llegó el gol con una acción que Martínez abrió para Moreno, quien le ganó en velocidad muy fácilmente a Insaurralde, sacó el centro desde el fondo y el remate de José Snad rebotó en un poste, pero la pelota quedó servida para la conversión de Acosta, quien se lesionó en la acción.
En el último tramo Boca no encontró soluciones con los cambios, Lanús controló la situación, pudo haber aumentado a los 38, en una jugada en la que volvió a ganar Moreno, esa vez por la izquierda, pero su disparo fue controlado por Sara.
No hubo mayores aproximaciones a los arcos, pero en todo momento se lo vio al último campeón seguro, duego del juego y encaminado hacia al victoria que consumó.