Tras su resonate victoria ante Novak Djokovic, Juan Martín del Potro no para de ganar. Ahora clasificó para los cuartos de final del torneo olímpico de tenis al imponerse al japonés Taro Daniel en tres sets, por 6-7 (4/7), 6-1 y 6-2.

"Está siendo una semana espectacular, que me cuesta creer, me cuesta entender. Lo estoy disfrutando mucho", afirmó Del Potro, verdugo en primera ronda del número uno Djokovic, al término del partido.

Tras la lluvia del miércoles que obligó a cancelar la jornada, el día amaneció en Rio con algunas nubes y sol, pero también con un viento molesto, que sobre todo incordiaba en la cancha número 2, apenas protegida por las tribunas.

Del Potro parecía tener encarrilado el primer set después de haber quebrado el servicio el jugador número 117 del mundo y que está en Rio por invitación de la Federación Internacional (ITF).

Pero el joven japonés, de 23 años, recuperó el servicio en el octavo juego y lo confirmó en el siguiente, colocándose 4-5 a su favor.

Del Potro, que quiere recuperar su nivel de Top10 tras varios años de problemas con las lesiones de muñeca (que le han llevado al puesto 141 de la ATP), pudo forzar el tie break.

A pesar de fallar mucho, Delpo logró empatar el marcador 5-5.

La Torre de Tandil combinaba buenos winners con bolas que se le quedaban muy cortas o excesivamente largas (22 errores no forzados en el primer set), sin encontrarse del todo cómodo ante un rival que no daba una pelota por perdida.

En el tie break el japonés, con golpes muy ajustados a las líneas, se puso con tres bolas de set y el argentino ya no pudo voltear el marcador, perdiendo el parcial por 6-7 (4/7).

"Dudé de mi revés y me metí en una laguna que me costó el set. Salí en el segundo bastante enojado conmigo mismo, buscando el aliento de fuera. Eso me despertó, empecé a revertir el partido y me sentía más activo", explicó el tandilense.

Delpo reaccionó quebrando en blanco el primer servicio del japonés en el segundo juego (2-0), lo que llevó al público argentino a recuperar la confianza en su compatriota, hasta ese momento demasiado irregular.

Se colocó 3-0 con otro juego en blanco, en el que combinó un potente saque, con buenos golpes, profundos y a las líneas, y una espectacular dejada.

Volvió a quebrarle Delpo en el cuarto game, con un espectacular smash en la red tras el cual el argentino lanzó un grito al japonés, con una mirada desafiante mostrando al asiático que el partido había dado la vuelta. El 6-1 del segundo set era un reflejo de este vuelco.

Y lo confirmó en el quinto juego del tercer set, donde volvió a conseguir el break y ponerse con 3-2 ante una hinchada argentina totalmente entregada y que no paraba de alentar al tandilense.

"Esto no se puede hacer durante el año, es como jugar en casa, lo estoy disfrutando muchísimo, me están alentando un montón. Me siguen enviando mensajes por el partido de Djokovic, está siendo una semana espectacular que me cuesta entender, me cuesta creer", admitió.

Cerró el partido con un ace (6-2), tras casi dos horas y cuarto de partido, y su próximo rival será el español Roberto Bautista, que este mismo jueves se deshizo del luxemburgués Gilles Müller. Espera un puesto en semifinales y la lucha por las medallas.

"Él juega muy bien. Es muy sólido desde el fondo, muy rápido. Va a ser difícil meter winners, que mi pelota pueda romper la barrera de su juego. Voy a necesitar el apoyo del público, como hoy, que fue fantástico. Acá hay que tratar de dejar hasta la última gota de sudor y es lo que vengo haciendo", explicó el argentino.