En el marco de la dura negociación por la deuda aún en default, el gobierno argentino se encontró con un dato llamativo que a la vez trae alivio.

Es que llamó la atención del equipo económico que existe el equivalente a u$s 1.500 millones de deuda original en default que no ingresó en canjes ni se presentaron reclamos.

Funcionarios creen que pertenecerían a personas muertas pero también se inclinan por la posibilidad de que no puedan, por el origen dudoso de los fondos, hacer reclamos judiciales.

Si hubieran seguido ese sendero, serían u$s 4.500 millones en sentencias.

El dato trajo algo de alivio cuando el Gobierno se apresta a lanzar en 2016 por 22.500 millones de dólares en bonos.