Tras varias horas de negociaciones, le puso un número a la deuda de la Argentina con los fondos que compraron títulos a precios basura para litigar contra el país
Tras horas de negociaciones a puertas cerradas entre el enviado del Gobierno, los fondos buitre y el mediador impuesto por el juez Thomas Griesa, apareció un número sobre la deuda con los bonistas que no entraron al canje de deuda y los que comprar títulos a precios de remate: son U$S 9.000 millones de dólares, según estimó Daniel Pollack, el mediador designado por el juez de la causa, el controvertido Thomas Griesa.
Se discutieron “informalmente” los reclamos de los holdouts, que rondarían -según se especificó- los 9.000 millones de dólares.
A las 9 de la mañana en punto, Caputo ingresó junto a su vice Santiago Bausili a las oficinas del “special master” Pollack a negociar con los holdouts.
El funcionario dijo que las negociaciones se extenderían todo el día. “No esperen novedades hoy”, dijo a esta corresponsal. Con un sobretodo gris y mochila al hombro, el negociador llegó caminando y dijo que primero conversaría con el medidor y más tarde con los bonistas. Una hora después llegó Pollack. A la cita también llegaron el manager de Elliot, Jay Newman, y Jonathan Pollock, la mano derecha de Paul Singer, el dueño del principal fondo acreedor. También representantes de Aureluis, Bracebridge Capital, Dart, entre otros.
Se reunieron de 1 a 5 de la tarde y se fueron por una entrada lateral, algunos de ellos tapándose la cara. El resto permaneció adentro un tiempo más. También estuvieron presentes representantes de los llamados “me too”, los bonistas que se sumaron a último momento a la demanda de los fondos principales.
El ministerio de Hacienda y Finanzas señaló que la propuesta oficial se haría “esta semana” pero que aún está “en elaboración” y será en términos “muy distintos a los trascendidos periodísticos”, que indicaban que podría haber una quita en el capital de entre un 15 y 25%, según las versiones.
El ministerio señaló que buscan “lograr una quita a los intereses punitorios que pesan sobre la deuda con los bonistas”. Ya varias veces el ministro Alfonso Pat Gay había dicho que los intereses que fueron establecidos por el juez Thomas Griesa en sus fallos y que aún siguen corriendo estaban mal calculados.
NML Capital y Aurelius obtuvieron en 2012 una sentencia de Griesa para cobrar capital e intereses por un monto que asciende a 1.750 millones de dólares pero a esos fondos se sumaron en 2014 los “me too” (yo también), que llevaron la cifra total a unos 10.000 millones, aunque algunos estiman que la cifra podría ser aún mayor. Sin embargo, en un comunicado emitido por Pollack por la noche, se especificó que la deuda “ahora totalizaba 9.000 millones de dólares”.
El mediador dijo que no se había alcanzado ningún acuerdo ni se había establecido una nueva fecha para reasumir las negociaciones, pero que era “posible” que continuaran esta semana.
Y señaló que él mismo seguiría reuniéndose “con las partes, por separado o posiblemente juntos, para ayudar a alcanzar un acuerdo”.