Lo aseguró el jefe de Gabinete, Marcos Peña, al anunciar la creación del Ente Nacional de Comunicaciones. ¿Tolerarán las críticas?
El kirchnerismo buscó destruir al periodismo crítico y para eso dilapidó los fondos públicos como nunca desde la última dictadura militar.
Ahora, el gobierno de Mauricio Macri promete que esa etapa de persecución terminó, pero igual habrá que ver qué ocurre cuando llegue la difusión de los problemas a través de la prensa independente.
El jefe de Gabinete, Marcos Peña, prometió que "se termina la guerra del Estado contra el periodismo" y "comienza una política pública de comunicaciones del siglo XXI".
En una rueda de prensa de Casa de Gobierno, en que también participaron el ministro de Comunicaciones, Oscar Aguad, y Miguel de Godoy por la Afsca, anunció un decreto de necesidad y urgencia que fusiona la autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca) con la Autoridad Federal de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Aftic).
Peña anunció así la creación del Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM) que encabezará De Godoy y dependerá del ministro de Comunicaciones.
Ese ente tendrá representación parlamentaria a diferencia de la AFSCA y la AFTIC.
“El resultado de esa guerra contra el periodismo fue malo para todos. Hoy tenemos una Argentina peleada con una tensión permanente para el periodismo”, dijo Peña. El funcionario dijo que ahora “comienza una política pública de comunicaciones del siglo XXI”.
Prometió, además, que se van a sacar “cepos a la industria para que haya un contexto de competencia”.
Y que "hoy comienza una política pública de comunicación del siglo XXI, con una mirada en la que todos los argentinos puedan acceder a servicios de Internet, telefonía y cable con pluralidad, competencia y modernidad", planteó el funcionario y anunció que se buscará "una nueva ley de comunicaciones que integre las leyes de medios y de tecnología de la comunicación, para tener un marco normativo del siglo XXI.
“Queremos un marco normativo del siglo XXI”, señaló Peña, al decir que “para el Estado, no hay medios enemigos ni medios amigos”.
Los cambios serán instrumentados a través de un decreto de necesidad y urgencia para lo que el funcionario nacional definió: “El DNU es una herramienta constitucional", dijo Peña en conferencia de prensa.