Los operativos fueron solicitados por el fiscal Marijuan, quien requirió estados contables de la empresa que se encuentra en el centro de la tormenta por sospechas de lavado
El empresario ultrakichnerista ligado a negocios con la familia presidencial, Lázaro Baez, volvió a sufrir una embestida judicial.
El juez federal Sebastián Casanello allanó una petrolera vinculada con Báez, en el marco de una de las causas por presunto “lavado de dinero”.
La compañía es Epsur S.A., una de las petroleras de Báez, y el procedimiento apuntaba a la búsqueda de documentación contable.
El juez allanó el domicilio que Epsur tiene en Capital Federal y otro en Comodoro Rivadavia –mediante una rogatoria enviada al juez local- de donde se retiraron libros contables de la empresa.
El allanamiento había sido solicitado la semana pasada por el fiscal federal Guillermo Marijuan cuando pidió la indagatoria de Báez y otras 15 personas por presunto lavado de dinero.
Marijuan había requerido los estados contables de la empresa desde su creación hasta este año.
Según el fiscal, Báez realizó cuatro plazos fijos a nombre de Epsur S.A. por 7,5 millones de dólares que no cuentan con documentación que respalde el origen de los fondos.
“De la documentación cotejada, surge que en los estados contables de Epsur SA no surgen en su activo la tenencia de los plazos fijos en dólares, y que dichos estados contables no cuentan con firma de las autoridades de la empresa y presentan inconsistencias en sus cifras”, detalló el fiscal Marijuan.
Además, cuando fue allanada la financiera S.G.I, de Federico Elaskar, y la cual habría creado empresas fantasmas para sacar plata de Báez, se encontró documentación de Epsur.