La derrota de Colombia ante Venezuela en el debut transformó el interesante choque ante Brasil en un partido bisagra para el equipo de José Pekerman. Y así quedó demostrado desde el primer minuto.

La necesidad y la pelota eran del equipo cafetero. Brasil, paciente, replegado, con las líneas bien juntas y con la carta fuerte de Neymar, siempre lista para ganar cualquier mano a mano.

Con James Rodríguez y Cuadrado en la elaboración de juego, esta vez el entrenador argentino optó por Teo Gutiérrez como acompañante de Falcao arriba. La primera chance llegó con un bochazo largo y preciso del exBanfield que pegó en la espalda del delantero de River y Falcao en la puerta del área no pudo conectar bien.

En Brasil todo lo bueno pasaba por los pies de Neymar. El delantero de Barcelona baja a buscar, gambetea, intenta generar sociedades pero muchas veces parece hablar un idioma diferente al de sus compañeros. El equipo de Dunga apenas se aproximó con un remate desde afuera de Dani Alves que salió muy desviado.

Lo tuvo Colombia a los 25 minutos con un derechazo cruzado de Carlos Sánchez que se desvió en un defensor y salió besando el poste de Jefferson. Y empezó a acorralarlo con pelotas paradas desde el botín zurdo de James. Hasta que a los 35 llegó el merecido premio. Centro frontal al área brasileña que no lograron sacar y capturó Jeison Murillo para el 1 0