Se trata de un hombre que fue detenido en el departamento de Rivera junto a otras cinco personas. Trabajaba como cuidacoches en Valizas
Este miércoles, seis personas fueron detenidas sospechadas de haber participado en el crimen de la adolescente Lola Chomnalez, asesinada en diciembre del año pasado cuando pasaba unos días de vacaciones en el balneario uruguayo de Barra de Valizas, junto a su madrina, el esposo de esta y un hijo de 14 años.
Según publica el diario El Observador, uno de los detenidos confesó ser el asesino de la joven argentina.
El individuo trabajó como cuidacoches en el balneario donde fue encontrado el cuerpo de la adolescente el fin de año pasado.
Tras la confesión, los investigadores cotejan ahora el ADN del sospechoso con el encontrado en la escena del crimen.
La prensa uruguaya informó que el hombre declaró hasta las 4 de la madrugada y quedó detenido e incomunicado. A las 10 horas, la jueza realizará -junto al sospechoso- un recorrido por la zona de Valizas donde fue hallado el cadáver de Lola.
En total, cuatro hombres y dos mujeres fueron detenidas tras una denuncia anónima y declararon en la jefatura de Policía de Rivera. Luego de comparecer ante la Justicia, se constataron varias contradicciones entre los primeros dichos de los detenidos.
El sospechoso, de 27 años, es un hombre oriundo de Rivera con antecedentes penales por "lesiones" y varias anotaciones en la Unidad especializada en Violencia Doméstica.
En su declaración, primero negó haber tenido algo que ver con el hecho, pero luego admitió que a fines de diciembre se encontraba en Valizas.
De acuerdo con fuentes de la investigación reseñadas por el matutino uruguayo, la persona que realizó la denuncia anónima "aportó datos creíbles" que solo pueden ser atribuibles "a conocimiento pleno de los hechos, o en su defecto, un odio enfermizo contra el detenido", afirmaron a nivel policial.
El presunto asesino tiene una gran similitud con el identikit que la policía de Rocha dio a conocer después del asesinato.
Además, el denunciante aseguró que el cuidacoches desapareció "sospechosamente" de la zona tras el hecho.
En los primeros meses de la investigación hubo más de una decena de detenidos, que luego quedaron en libertad. La pesquisa sufrió una serie de vaivenes, en la que incluso hubo un cambio de juez.
La causa volvió a foja a cero y hasta ayer, el expediente no presentaba mayores avances y todo parecía indicar que el asesinato nunca se resolvería.
La abogada de la familia, Marianela Melay, quien trabaja junto al letrado Jorge Barrera, dijo ayer que "de la declaración surgieron algunos elementos que mañana (por hoy) van a seguir ampliándose. Mucha cosa para diligenciar", precisó.
Además, anunció que habrá nuevas citaciones.