Arrancó el primer paro del último año de Cristina Fernández en el poder
Gremios reclaman contra el impuesto a las Ganancias que pagan más de un millón de trabajadores. La izquierda hace piquetes en los principales accesos. Sin trenes, colectivos, subtes ni combustibles
30 de marzo de 2015
Con piquetes incluidos, para protestar contra la aplicación del impuesto a las Ganancias sobre el salario de más de un millón de trabajadores, decenas de gremios y centrales obreras opositoras realizarán mañana el primer paro nacional del año, que promete impactar en los servicios, en especial del transporte, la actividad financiera y el expendio de combustibles, entre otros.
La paralización de casi todo el transporte público impactará en el resto de las actividades ante la imposibilidad que tendrá la gente de llegar a sus lugares de trabajo, llevar a los hijos a la escuela o cumplir con otras tareas habituales.
La medida de fuerza fue anunciada hace casi un mes por la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), pero por la adhesión de otros gremios terminó convirtiéndose en una huelga nacional, la primera del año y la cuarta durante la gestión de Cristina Kirchner.
Se plegaron a la medida la CGT opositora de Hugo Moyano, la CTA de Pablo Micheli y la CGT Azul y Blanca de Luis Barrionuevo, además de gremios vinculados con la venta de combustibles, bancarios, judiciales, portuarios y aeronáuticos.
Este martes no funcionarán trenes, colectivos, ni vuelos, los bancos no atenderán al público, tampoco se venderá combustible, no habrá recolección de residuos, mientras que sí habrá taxis -el sindicato no adhirió-, aunque se espera un servicio reducido.
En cuanto al subte, si bien los metrodelegados no adhirieron a la medida de fuerza, admitieron que como la Unión Tranviarios Automotor (UTA) convocó al paro es posible que directamente no circulen formaciones durante la jornada.
El Gobierno, a través del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, instó a las cámaras empresariales del transporte a garantizar servicios mínimos, aunque negó que se haya condicionado el pago de subsidios.
En conferencia de prensa en la Casa Rosada junto al ministro de Economía, Axel Kicillof, Fernández sostuvo: "Los llamamos para pedir una actitud responsable porque creemos que los empresarios tienen que hablar con los gremios y poner las cosas en su lugar. Explicarles la cantidad de dinero que el Estado pone".
A su vez, Kicillof sostuvo que los gremios que adhieren al paro, involucran "sólo a entre el 10 y el 15%" del total de trabajadores que pagan el impuesto a las Ganancias.