Son los del Airbus estrellado contra los Alpes. "Los restos humanos no son más grandes que una pequeña maleta", dijo el jefe del operativo
En una frase que hiela la sangre, el general de la gendarmería David Galtier, a cargo del operativo de rescate del Airbus que se estrelló en los Alpes y dejó 150 muertos, describió que "los restos de cuerpos humanos que hemos visto no son más grandes que una pequeña maleta". Entre los miles de pedazos en que quedó reducido el aparato, "sólo se ha podido identificar el tren de aterrizaje", confirmó otro investigador, lo que hace pensar que el avión se desintegró al chocar contra las paredes rocosas.
En Seyne, una localidad cercana al lugar del accidente, ha sido instalada una capilla ardiente.
Asimismo, 300 bomberos y otros tantos gendarmes han sido movilizados, al igual que diez helicópteros y un avión militar.
La dirección de Aviación Civil Francesa (DGAC) había declarado una emergencia hacia las 09H30 GMT tras perder el contacto con el avión cuando sobrevolaba la localidad de Barcelonnette.
El piloto tenía "más de diez años" de experiencia y "más de 6.000 horas de vuelo", según la compañía alemana, y el avión entró en funcionamiento hace 24 años. La última gran revisión la pasó en el verano de 2013.
Se trata de la primera catástrofe aérea que se registra en Francia desde que se estrelló un Concorde al despegar del aeropuerto de Roissy, el 15 de julio de 2000, dejando 113 muertos, y es la más mortífera desde 1974, cuando se estrelló un avión de la compañía Turkish Airlines en el norte de París con un balance de 346 muertos.