Volverán a reunirse luego de Semana Santa, pero en el campo hay bronca y productores presionarían por nuevas medidas de fuerza luego de Semana Santa
El encuentro entre representantes del agro y el gobierno se cumplió hoy sin avances
concretos para resolver las cuestiones pendientes del sector, por lo que pasaron a un cuarto intermedio hasta después de Semana Santa.
La reunión, que duró más de tres horas, había sido convocada por el jefe de Gabinete, Alberto Fernández, ante el creciente malestar del sector agropecuario, con algunas entidades que incluso comenzaron a hablar de realizar un nuevo paro.
El jefe de Gabinete recibió a los hombres del campo junto a la ministra Felisa Miceli y el secretario de Agricultura, Javier de Urquiza, y se encontró con un rosario de reclamos de parte de las entidades, que cuestionaron la "falta de compensaciones" prometidas para los productores trigueros y la virtual
intervención oficial en el Mercado de Liniers.
En representación del campo asistieron los presidentes de las cuatro entidades del campo: Luciano Miguens (Sociedad Rural), Eduardo Buzzi (Federación Agraria), Mario Llambías (Confederaciones Rurales Argentinas) y Fernando Gioino (CONINAGRO).
La dirigencia ruralista se retiró con caras largas de la Casa Rosada y deslizó la falta de respuestas oficiales.
Apenas el titular de la Sociedad Rural aceptó hacer algunas declaraciones ante los periodistas, y confirmó que "resta resolver varios puntos aún".
En la reunión, la Federación Agraria presentó un cuadro de situación sobre los temas pendientes del sector.
Entre esos puntos se incluyó la compensación retroactiva al primero de noviembre de 2006 para las primeras toneladas de trigo por productor.
"La situación del campo y de los productores es muy compleja. En esta reunión, el Gobierno acusó recibo del malestar del sector y reconoció que el sector ganadero está en emergencia, por lo que se fijó una nueva reunión para el 11 de abril en la que se tratará exclusivamente este tema", sostuvo Buzzi.
Además, convocó a una reunión al Comité de Acción Gremial en Rosario para este sábado.
Buzzi dijo que "todas las partes coincidimos en la preocupación por no detener los procesos productivos, así como también en que no haya un incremento de la inflación, pero el Gobierno tiene deberes que cumplir: resolver los problemas de los productores, en especial de los criadores, y acelerar y simplificar las
compensaciones en el mercado del trigo".
Por su parte, el vicepresidente segundo de Federación Agraria, Ulises Forte -que también asistió al encuentro- indicó que la entidad entregó un petitorio a Alberto Fernández en el que se enumeran los problemas a resolver en cuanto al endeudamiento de los productores con el Banco Nación, con el maíz, el trigo, el ganado porcino y el vacuno.
Los productores reclaman una refinanciación de deudas por parte del Banco Nación, a un plazo de 15 años con tres de gracia.
En materia ganadera, desde la Federación Agraria piden la liberación de los permisos de exportación, denominados ROE para que se pueda exportar el 100 por ciento de los cortes y categorías que no compiten con el mercado interno.
Con relación a las medidas de fuerza anunciadas por CARBAP, la entidad más dura, voceros de CRA dejaron trascender hoy que "desde la presidencia de la entidad madre no se comparte esa postura y se prioriza el diálogo".
También exigen una reapertura gradual de la exportación de maíz.
En tanto, Miguens señaló que el sector de la carne no "pide beneficios especiales, pero tampoco quiere ser el pato de la boda".
"Se busca una justa distribución, que sea más equitativa en toda la cadena de producción. El sector no pide beneficios especiales pero tampoco ser el pato de la boda", planteó el titular de la SRA.