Es un ex funcionario de Economía cuyo testimonio podría resultar clave para el futuro judicial de Boudou, harto de las amenazas que declaró padecer durante las últimas semanas
El caso Ciccone sigue deparando sorpresas: un ex funcionario del Ministerio de Economía cuyo testimonio en el "caso Ciccone" podría resultar clave para el futuro judicial del vicepresidente Amado Boudou se fue de la Argentina por las amenazas que declaró padecer durante las últimas semanas.
Se trata del ex director general de Asuntos Jurídicos del Palacio de Hacienda, José Guillermo Capdevila.
A través de un comunicado, confirmó las amenazas que padecieron él y algunos familiares.
"Temo por mi vida y nadie de los que tienen la responsabilidad institucional y moral fueron capaces de cuidarme", explicó.
"Supongo que cuando las condiciones de seguridad estén dadas podré venir, volver a mi país a declarar como testigo y podré seguir desde el lugar que me toque tratando de hacer lo mejor por nuestra Argentina".
Horas después de marcharse del país, un allegado a Capdevila presentó dos escritos judiciales en la misma línea.
Uno en el "caso Ciccone", que instruye el juez federal Ariel Lijo; el segundo, en la causa por amenazas contra el ex funcionario de Economía que se inició tras la publicación de LA NACIÓN y quedó en manos del juez Sebastián Casanello.
Las presentaciones judiciales de Capdevila coincidieron, en tanto, con el arribo del suspendido fiscal José María Campagnoli a la sede de la Procuración donde se celebraría la primera audiencia de su jury político , a raíz de su actuación como investigador principal de la causa sobre Lázaro Báez , Leonardo Fariña y Federico Elaskar. Según Campagnoli, ahora afronta una serie de represalias desde el poder. "Me hicieron una persecución que se fue recrudeciendo. Es una clara señal para disciplinar a los fiscales", afirmó.
Por su parte, Capdevila confirmó en ambos escritos judiciales que había padecido amenazas y sostuvo que consideraba que no estaban dadas las condiciones de seguridad indispensables para testificar en Tribunales.
En ninguno de esos escritos, sin embargo, el ex funcionario identificó a sus agresores. Pero dejó indicios en su comunicado público. Recordó que fue convocado como testigo ya que redactó un dictamen en el que objetó que Boudou, por entonces ministro de Economía, apoyara con su firma -pero por fuera de su competencia funcional- que la AFIP le otorgara un plan con beneficios excepcionales a la nueva Ciccone, ya controlada por The Old Fund y presidida por Alejandro Vandenbroele.
Soy testigo judicial, indicó el por entonces subalterno de Boudou, "por el hecho de haber cumplido con mi deber legal, ya que en ese momento, antes que se me desplazara, era el director general de Asuntos Jurídicos del Ministerio de Economía, en un expediente administrativo y advertir al entonces ministro de Economìa, Amado Boudou, que no debìa intervenir en el expediente de Ciccone, consejo que no siguió".