La línea que conecta Once con el oeste bonaerense funciona con ocho formaciones menos en horas pico por una medida de fuerza de trabajadores
Muchas doras y quejas, protesta gremial, cruces políticos, es el clima que se vive por tercer día consecutivo en el tren Sarmiento que funciona con ocho formaciones menos en horas pico por un reclamo del gremio Unión Ferroviaria al Estado.
Esta mañana, los usuarios volvieron a quedar varados en los andenes. Las demoras son de entre 20 y 40 minutos.
¿Qué pasó? El gremio reclama un resarcimiento económico de unos 300 millones de pesos por el "pase" de la concesión de la empresa TBA al Estado. Y también exigen un aumento salarial del 40 por ciento.
El Gobierno entiende que las condiciones laborales de los empleados del Sarmiento no se modificaron y que ese resarcimiento no corresponde.
"Llámenlo como quieran: indemnización, resarcimiento, gratificación. Si se decide eso, yo me voy. ¡Cómo vamos a pagar una indemnización a personas que no perdieron su trabajo! No se puede hacer lo que no corresponde. No voy a hacer nada que no se pueda explicar públicamente", lanzó ayer el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo .
Rubén "Pollo" Sobrero, referente gremial de Unión Ferroviaria, contestó que Randazzo es "un mentiroso y caradura que no quiere decir la verdad". Y sostuvo que "no hay voluntad política" para resolver el conflicto.
Además, el gremialista advirtió que este "quite de colaboración" se prolongará toda la semana. "No queremos ir a un paro total", deslizó.
Para Sobrero, hay un motivo político por el cual el Gobierno no paga el resarcimiento. "Nunca nos van a perdonar que hayamos denunciado a Jaime [el ex secretario de Transporte Ricardo Jaime] y que hayamos sido los que mostramos la corrupción en el sistema ferroviario", aseguró.