El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé en los próximos tres años una reducción de sus gastos administrativos en términos reales (descontada la inflación) para responder al problema presupuestario al que se enfrenta, según informó ayer el organismo.

Su problema de ingresos fue precipitado por la decisión de Brasil y Argentina de saldar de forma anticipada su deuda con el Fondo -que se financia con los intereses de los préstamos que otorga a sus países miembros-, como reconoce el estudio presupuestario publicado ayer por el organismo.

El FMI divulgó sus presupuestos para los próximos tres años, que analizó el 28 de abril su Consejo Ejecutivo, que representa a sus 184 países miembros.

El organismo pretende congelar en términos reales sus gastos administrativos en el año fiscal 2007, que comenzó el pasado 1 de mayo.

En los años fiscales 2008 y 2009 habrá caídas en términos reales de un 1 por ciento en esas partidas.

La institución entrará en números rojos en el año fiscal 2007 y acumulará un déficit de 588 millones de dólares en tres años, según datos del Fondo.

En el año fiscal 2007, sus gastos administrativos, que incluyen salarios, viajes y mantenimiento de edificios, ascenderán a 911,9 millones de dólares, de acuerdo con la propuesta presupuestaria aprobada por el directorio.