Es la estimación realizada por especialistas tras publicarse los detalles de los cambios. El Gobierno había dicho que el tope sería de 284%
En medio de un gran desconcierto, las tarifas de gas subirían hasta 500 por ciento según los cambios publicados en forma oficial.
Así, 11 días después de anunciar las subas derivadas de la quita de subsidios, la reducción de las compensaciones tarifarias fue acompañada de significativos aumentos en el precio del gas y en el componente que utiliza la estatal AySA para valorizar sus servicios.
Los aumentos en juego hasta agosto para usuarios residenciales podrían rozar el 500%.
Este ajuste representa casi el doble de lo que habían anunciado los ministros de Economía, Axel Kicillof, y de Planificación, Julio De Vido.
En el caso de AySA, las subas finales estarían más en línea con incrementos de entre 170% y 406% que habían informado los funcionarios.
El gobierno oficializó ademas el nuevo “esquema de uso racional del gas” que le permitirá a los usuarios hogareños esquivar o atemperar los ajustes.
Para evitar aumentos, tendrán que registrar una baja en el consumo superior al 20% con respecto al mismo bimestre de 2013.
Aquellos que logren “ahorrar” entre 5% y 20% afrontarán sólo la mitad de las subas programadas hasta agosto.