Tras la ejecución en plenos bosques de Palermo de un presunto narco, la Conferencia Episcopal pidió al gobierno "tomar conciencia de la gravedad de estos hechos"
En un duro llamado de atención a un gobienro que aparece paralizado ante el avance del crimen en la Argentina, la Conferencia Episcopal Argentina lanzó hoy un duro llamado a las autoridades para "tomar conciencia sobre la gravedad de estos hechos, luego de que un presunto narco fuera ejecutado a plena luz del día y ante decenas de testigos en los bosques de Palermo.
El arzobispo de Santa Fe y titular de la Conferencia Episcopal Argentina, monseñor José María Arancedo, pidió "no" acostumbrarse a "convivir con el delito, la inseguridad y la muerte" y a las autoridades a "tomar conciencia de la gravedad de estos hechos", en línea con lo que venía reclamando Jorge Bergoglio ante de convertirse en el Papa Francisco.
"No podemos acostumbrarnos a convivir con el delito, la inseguridad y la muerte", alertó Arancedo, mientras en el gobierno aún discuten si el país en el país se produce o no droga.
"Elevo mi voz de repudio por estos hechos, siento la necesidad de hacer un llamado a toda la sociedad, en especial a las autoridades y a la dirigencia, para tomar conciencia de la gravedad de los hechos que hemos vivido", manifestó en referencia a la inseguridad, especialmente en la provincia de Santa Fe.
Arancedo fue hasta el hueso y dijo que "en este contexto de dolor e indignación, hago un llamado urgente y respetuoso a las autoridades, como a todos los hombres y mujeres de buena voluntad, a movilizar todas nuestras fuerzas al servicio de la vida y del bien común".