El ministro de Economía, Axel Kicillof, reconoció esta mañana que “en enero pasó algo con los precios”, al tiempo que insistió en denunciar “maniobras especulativas” y en afirmar que el Gobierno ya está enfrentando el tema precios con “una batería enorme de medidas”.

“En enero pasó algo con los precios que el Gobierno está abordando y atacando con una batería enorme de medidas para poder combatir este problema”, dijo el ministro.

Así, tras reconocer ayer oficialmente una inflación mucho mayor a la que venía admitiendo, el Gobierno pasó a considerar a la evolución de los precios como “un problema”.

Pero Kicillof también sostuvo que el nuevo IPC Nacional Urbano no refleja “inflación sino variación de precios” porque “algunos suben y otros bajan”. Y volvió a cargar contra las mediciones privadas: “Iban de 3,5 a 6,1 con una variabilidad de casi el doble, con una metodología del capricho; observé cómo se leían esos índices, con un total oscurantismo”.

Según el ministro, en la formación de precios “hay maniobras especulativas” y “campañas mediáticas que generan desánimo” en la gente. “Esto es malo porque después la gente toma malas decisiones”, se quejó.

Sobre las paritarias, dio a entender que podrían retrasarse al afirmar que hoy “los trabajadores están guiados por el vaticinio de que la variación de precios va a ser gigantesca” y agregar: “Una vez que esta campaña se pinche, vamos a tener discusiones serias”.

El funcionario también cargó contra la oposición, de la que dijo que tiene planes “ajustadores, recesivos y regresivos” y a cuyos dirigentes les pidió “que hablen con la verdad a la gente y digan qué partidas quieren reducir”. “¿Quieren bajar las jubilaciones, bajar la obra pública, la Asignación por Hijo, el plan Conectar?”, preguntó retóricamente y sentenció: “Quieren el plan de siempre de la derecha, que es la reducción del gasto público”.