El fiscal Campagnoli está "convencido" de la participación de la procuradora Gils Carbó y de la presidenta en el desmantelamiento de su oficina
El suspendido fiscal José María Campagnoli, quien investigaba al empresario Lázaro Baez, señaló que “sería muy ingenuo” de su parte no creer que detrás del desma ntelamiento de su equipo esté la mano de su jefa, la procuradora Alejandra Gils Gabo, y hasta de la propia presidenta CristinaFernández.
El hombre de la justicia, dijo que para él está claro que el verdadero motivo del desmantelamiento de su equipo de investigadores "es incomodar a aquellos funcionarios de carrera, muy experimentados, que ahora quedaron bajo la órbita de un funcionario administrativo y no de un fiscal".
“Yo estoy suspendido, no echado, puedo volver en cualquier momento, y por lo tanto desmantelar un equipo de trabajo que trabajaba conmigo, me parece gravísimo”, remarcó.
"Los fueros que tenemos los fiscales con para poder investigar a grupos poderosos e incluso al poder. Pero mis fueron no duraron más de cinco días, e inmediatamente fui suspendido y quedé fuera de mis investigaciones. De eso se trata ahora mi lucha, que es volver a mi cargo”, añadió.
Si bien dijo que no le consta que existan otras presiones a otros fiscales, señaló a veces no hace falta una presión concreta sino "la sutileza de mostrar qué pasa si alguien se anima a investigar al poder”.
Este lunes, luego de que se conociera la mudanza de la Secretaría de Investigaciones Penales (SIPE), que había trabajado con el suspendido fiscal en numerosas investigaciones, incluida la que involucra al empresario kirchnerista Lázaro Báez, Campagnoli y dirigentes de la oposición denunciaron que se trató de un desalojo y que los integrantes del órgano pasaron a realizar “tareas de archivo”. A partir de una solicitud de Gils Carbó, el fiscal se encuentra suspendido desde diciembre del año pasado, reclamando por su situación en la Justicia y a la espera de que un jury del Tribunal de Enjuiciamiento del Ministerio Público analice su caso.